El Real Madrid brilla a las puertas del título liguero
Con Javier Saviola recuperado, los blancos lograron superar al Athletic de Bilbao Los de Caparrós tuvieron sus ocasiones hasta que Casillas le paró un penalti a Garmendia
Actualizado: GuardarNo cantó el alirón por mérito del Villarreal pero lo ensayó ante un público entregado. Un Madrid notable, versátil, perseverante, fluido y vistoso, dio buena cuenta del Athletic en el Bernabéu y recuperó incluso a Saviola. Sufrió en la primera mitad, donde un Casillas soberbio volvió a resultar la bestia negra de los leones y detuvo un penalti a Garmendia, pero se paseó en la reanudación y alejó a los vascos de Europa. A falta de cuatro jornadas, aventaja en diez puntos al submarino amarillo y en 14 al Barça. Para ser campeón en Pamplona, le sirve con firmar el mismo resultado que consiga el Villarreal en casa contra el Getafe e incluso perder si los levantinos no ganan.
Todo estaba preparado en La Cibeles para una gran fiesta blanca, pero resulta que Senna se encargó de retrasarla con un golazo desde medio campo que tumbó al Betis. Pese al golpe anímico que suponía no ser campeón este domingo, el Madrid salió con ganas, dispuesto a buscarle las cosquillas a un Athletic que no tenía nada que defender y sí una enorme ilusión de brillar en el escaparate de Chamartín y acercarse a la UEFA. Con estas premisas, el partido tenía que ser entretenido, abierto, disputado.
Schuster apostó por Saviola en lugar de Robben y el Conejo se esforzó mostrarse en su cuarto encuentro como titular, quizá pensando en conseguir una buena salida a final de curso. Formó pareja con Raúl, listísimo a la hora de arrancar al límite del fuera de juego, y estuvo rápido, versátil, incisivo, profundo, muy peligroso. Gracias a su olfato goleador, se aprovechó de un mal despeje de Armando para adelantar a los blancos antes del primer cuarto de hora. Mientras le aguantó el físico, el argentino estuvo en casi todas.
Gran Sneijder
Con Gago, Guti y sobre todo Sneijder entonados y dos puntas móviles, el Madrid se gustaba ante un rival alegre y blando atrás, donde el reaparecido Gurpegui acusó sus dos años de inactividad por dopaje. Pero en su afán por agradar, brindaba espacios a un Athletic alegre que inquietaba cada vez que encontraba a Llorente. Gracias a su envergadura, el riojano ganaba a Heinze y complicaba la vida a Pepe, aficionado a sacar los brazos más de la cuenta. A causa de su inferioridad física, el argentino cometió un penalti que lanzó con potencia Garmendia y desvió Iker a córner. El portero, espléndido, ya había sacado una mano milagrosa tras un cabezazo de Etxeberria.
Tras ver las orejas al lobo, el Madrid aumentó el ritmo en la reanudación. Buscó con ahínco el gol y trazó buenas combinaciones que hicieron disfrutar al Bernabéu. Con el título casi en el bolsillo, los de Schuster buscaban la belleza que no encontraron en casi todo el campeonato. Sneijder lo intentó con disparos con rosca envenenada, Gago probó de larga distancia y todo se decidió cuando Schuster movió ficha.
El alemán dio minutos a Higuaín y Robben, descanso a Raúl y Robinho, y acertó de pleno. Entre el argentino y el holandés firmaban el segundo en una acción de tiralíneas e instantes después el Pipa firmó el tercero tras un desajuste vasco. No hubo vuelta olímpica pero casi.
Calderón, muy contento
«En 30 años que llevo en el Real Madrid nunca he visto una alegría tan grande, con la gente haciendo la ola. No recuerdo el Bernabéu con esta alegría. Hemos conseguido formar un equipo y somos todos una familia», llegó a asegurar Ramón Calderón, que destacó «el trabajo, el esfuerzo, el orden y la disciplina del equipo» para conquistar de nuevo la Liga.
El presidente blanco reconoció que este título le sabrá «mejor» que la de la temporada pasada, «porque es la segunda consecutiva después de 18 años». Calderón se mostró orgulloso de la trayectoria del Madrid desde que él ocupa el cargo.