Ministras
Actualizado:Resulta de tal zafiedad y de vulgar cobardía, por disimulada, la crítica a la elección por el presidente de las mujeres de su Gobierno, que lleva, sin ser ése el objetivo de los comentarios, a tapar otras realidades de urgente concienciación social. Las réplicas y contrarréplicas sobre la juventud o estado de gravidez de algunas de las ministras termina ocultando aspectos que debieran constituirse en temas de debate fundamentales. Puede cuestionarse probablemente si la juventud, lo que implica por simples razones vitales falta de experiencia, es el mejor aval para un ministro-a. Experiencia profesional y de gestión comprobadas, en un Gabinete como el que debe gestionar la situación del país en plena explosión de una crisis económica global, de necesidad de racionalizar la obtención y uso de energía, carburantes y agua, de exigencias en la excelencia de los sistemas educativo y productivo para competir mundialmente, parece absolutamente un requisito.