La declaración de Ricardi ante la jueza, pendiente de fecha
Fuentes de la cárcel de Topas señalan que muestra indiferencia ante las últimas noticias
Actualizado: GuardarLa declaración de Rafael Ricardi ante la jueza del nº 2 de Instrucción de El Puerto de Santa María tan sólo está pendiente de que se fije una fecha concreta para que sea trasladado desde el centro penitenciario de Topas (Salamanca). Fuentes de esta prisión confirmaron ayer que los viernes son los días en los que se producen las conducciones de presos fuera del recinto. Pero, sin embargo, en la jornada de ayer no había constancia oficial de que pudiera salir Ricardi en las próximas horas, si bien no estaba del todo descartado.
La jueza y la Fiscalía lo solicitaron el pasado miércoles, ya que su declaración cobra ahora importancia a raíz de las nuevas pruebas halladas como el ADN de otro sospechoso encontrado en la víctima por la que fue condenado en el año 96 a sendas penas de 18 años cada una por dos delitos de agresión sexual. Tanto el Ministerio Público como la instructora del caso quieren interrogar al recluso por si se ratifica en la confesión que en dos ocasiones realizó en el año 99, cuando ya estaba entre rejas; o si proclama su inocencia como hizo cuando fue detenido y durante el juicio celebrado en la Audiencia Provincial.
Además de este testimonio, también está pendiente el reconocimiento que deben hacer las diez víctimas de los dos individuos que han sido arrestados recientemente por la Policía, y a los que les imputan la decena de agresiones sexuales cometidas entre los años 1995 y 2000. Esta identificación es fundamental en las cinco violaciones en las que no se han recuperado restos de ADN.
Aparente indiferencia
Las mismas fuentes consultadas del centro penitenciario de Topas explicaron ayer que Rafael Ricardi muestra una extraña indiferencia ante las últimas noticias y la posibilidad de que su condena sea revisada. Pese al interés mediático que suscita, «no evidencia ningún síntoma de alegría. Parece que se conforma con su estado actual. No se sabe si es puro conformismo o si no es consciente de lo que puede producirse si finalmente se confirma que no cometió esos delitos», señalaba un funcionario de la prisión que estuvo ayer mismo conversando con el recluso.
Cabe recordar que el caso en el que se ha visto implicado Ricardi dio un vuelco hace poco más de dos semanas. La Policía dijo estar convencida de había detenido a los dos delincuentes que durante años trajeron de cabeza al cuerpo por una sucesión de violaciones -diez casos con el mismo modus operandi- ocurridas en Jerez, El Puerto y Puerto Real entre los años 1995 y 2000. Tan convencido está de la culpabilidad de J. B. G. y F. P. G., ambos de 53 años, que no le importa reconocer que hace 13 años se equivocó cuando detuvo a Rafael Ricardi Robles. La víctima lo reconoció tanto por la voz como por su aspecto físico -tiene un defecto en un ojo-. Cinco años después, un nuevo estudio de ADN encargado al Instituto de Toxicología señala que la muestra no es de él.