Despejar incógnitas

ras la victoria frente al Numancia -no olvidemos que es el destacado líder de la Segunda División- al Cádiz se le presenta la oportunidad -demasiado tarde- para demostrarnos a los aficionados que los dos entrenadores cesados tenían razón cuando afirmaban que, «si lograban tres triunfos consecutivos, no sólo se situaría en el puesto de la clasificación que le corresponde, sino que tendríamos la ocasión de comprobar la calidad real de esta plantilla». En mi opinión, si el conjunto amarillo es capaz de ganarle al Sporting de Gijón, estaríamos en condiciones de afirmar que, al menos, se ha alcanzado el objetivo inmediato fijado por el actual entrenador. A partir de ese momento, siempre que los jugadores mantengan el nivel de concentración, de ganas y de ilusión, a Raúl Procopio se le abren las posibilidades de efectuar los cambios que considere oportunos para calibrar las actitudes y las aptitudes de los futbolistas de la actual plantilla de profesionales y la valía de los integrantes de las secciones inferiores. Entonces se le abrirá el periodo propicio para configurar el proyecto de la próxima temporada. Con estas afirmaciones declaro implícitamente que lo considero como una de los entrenadores válidos para dirigir al equipo y para conducirlo a metas más elevadas. Creo que estas diez jornadas serán suficientes para determinar si posee la preparación técnica para plantear los partido, la capacidad profesional para dirigir a un grupo humano tan heterogéneo y la autoridad moral para imponer sus criterios. Reconocemos que todavía no es el momento para adoptar decisiones, pero también hemos de tener en cuenta la madurez de la que ha dado pruebas al asumir los riesgos que entrañaba hacerse cargo de un equipo en el momento en el que se desplomaba de manera imparable. Por lo pronto ha superado las dos primeras pruebas: vamos a ver qué ocurre el domingo. Ese tercer triunfo consecutivo, que tanto deseaban sus predecesores, puede despejar importantes incógnitas.deportes@lavozdigital.es