A EXAMEN. Familiares de los menores de Gerona que han sido reconocidos hasta ahora. / EFE
ESPAÑA

El CSN duplica el número de afectados por el escape y examinará a 1.600 personas

Aparece en Reus un camión con tierra contaminada por cobalto 60 en una chatarrería que trabajó para la central

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) se reunió ayer con los alcaldes de las localidades próximas a Ascó y anunció que duplicará el número de personas que deberán someterse a análisis radiológicos tras el escape ocurrido el 26 de noviembre en la central nuclear tarraconense. Según el CSN, unas 1.600 personas, entre trabajadores, visitantes y proveedores serán examinados para controlar si poseen niveles anormales de radiactividad en sus organismos.

El CSN ha realizado ya «mediciones independientes a una muestra control de los trabajadores que pudieran haber estado más expuestos». Los exámenes radiológicos practicados hasta ahora a casi mil personas, entre operarios, proveedores y visitantes, no han revelado ninguna contaminación. «Si el personal hasta ahora analizado, que trabaja todos los días en la central, y las personas que la han visitado hasta ahora, no tienen ninguna afectación, es racionalmente descartable el riesgo para el resto de la población», recalcó Carmen Martínez Ten, directora del CSN.

Entre los que han dado negativo en los análisis están los 40 niños y 4 profesores controlados del colegio de los Maristas de Gerona, que visitaron la central a primeros de abril, antes de conocerse el incidente ocurrido cuatro meses antes.

Asímismo, Martínez Ten confirmó ayer que ha propuesto un expediente sancionador al titular de la central. El CSN ha creado también un grupo de trabajo para llevar a cabo «la estimación radiológica del suceso» y ha puesto a su cabeza al consejero e ingeniero en Física Nuclear Francisco Fernández Moreno. Martínez Ten, que comparecerá a petición propia ante el Congreso, ha señalado que el Consejo ha detectado en Ascó «debilidades en la cultura de seguridad del titular de la central», Endesa con una participación minoritaria de Iberdrola. La empresa «ha sustituido al director de la central y al jefe de Protección Radiológica», resaltó Martínez Ten, quien adelantó que el organismo que preside ha pedido «un análisis exhaustivo de la organización de Ascó».

«Un error»

El caso sigue abierto. Y, ayer, quedó más claro que nunca. La directora técnica de Seguridad Nuclear, Isabel Mellado, informó de que el Consejo localizó el lunes partículas contaminadas por cobalto 60 en un camión de chatarra procedente de la central, que había viajado a una chatarrería en Reus. Mellado explicó que «no es la chatarra el material contaminado, sino que hay partículas adicionales y material de tierra provenientes de la liberación de la contaminación que se produjo en el mismo incidente», dijo en alusión al escape en la central.

El director técnico de Protección Radiológica, Juan Carlos Lentijo, aclaró que el tipo de contaminación del camión es «muy parecido al que está en las áreas exteriores de edificios de Ascó», e insistió en que se trata de «partículas mezcladas con arena o tierra». «A priori, si se confirma lo que se supone, que ha salido un camión de Ascó en estas condiciones, es un error. Qué duda cabe de que no tenía que haber salido», dijo, y añadió que la empresa titular de la central «debe reforzar todos los controles de materiales que entran y salen de ella».

Además, el CSN detectó ayer por la tarde un «punto de ligera contaminación» en una zona próxima a la planta, concretamente en un talud de la orilla del río Ebro. Asimismo, el organismo de control informó de que no se ha encontrado ninguna contaminación en los exámenes que se han realizado en los municipios de Vinebre y Ascó, en donde se están revisando zonas habitadas, viales y carreteras.

Ascó tardó más de 5 meses en informar del incidente al CSN. Martínez Ten aprovechó su comparecencia para desmentir que el suceso «lo descubriera una organización ecologista» que emitió una nota sobre el incidente «minutos antes que el CSN». Según la presidenta, la central había informado la mañana anterior a los representantes sindicales de Ascó y pidió sensatez a estos colectivos para evitar alarmismos.