Liverpool y Chelsea disputan hoy el duelo fratricida de las semifinales

En 2005, tras el 0-0 de la ida, los jugadores de Rafael Benítez ganaron en la vuelta por 1-0, mientras que el año pasado ambos partidos acabaron con 1-0 a favor del equipo local, por lo que se tuvo que desempatar en los penaltis, donde Pepe Reina resultó decisivo.

El recuerdo de ambos cruces planeará sobre los partidos de este año, ya que una tercera eliminación del Chelsea frustraría de nuevo su intención de lograr un gran triunfo europeo, y pondría en una situación complicada al propietario Roman Abramovich, criticado por los hinchas desde la marcha del portugués Mourinho.

Los londinenses parten en principio como favoritos, avalados por su buena marcha en la Premier League, donde están segundos y todavía en pleno pulso con el Manchester United por el título.

Benitez ironiza

«No creo que el Chelsea de (Avram) Grant sea muy diferente al Chelsea de Mourinho, salvo quizá por las ruedas de prensa», declaró Benítez en alusión a la discreción del técnico israelí y a la actitud provocadora del luso.

Durante los días previos, ambos equipos han ido calentando el partido con declaraciones destinadas a desestabilizar al adversario, como las de Grant, alabando las cualidades del capitán de su rival, Steven Gerrard, del que dijo que querría fichar para el Chelsea.

«A juzgar por los resultados, Grant está haciendo un buen trabajo», apuntó Benítez, que tiene ante sí otra gran oportunidad para hacer algo grande en Europa, mientras que en el campeonato nacional sólo puede aspirar a conservar su cuarta posición, para clasificarse para la próxima Liga de Campeones.

El Chelsea recuperará para el partido a Frank Lampard, que fue baja durante una semana por la enfermedad de su madre, pero tiene como dudas al marfileño Didier Drogba y al alemán Michael Ballack. El Liverpool, en principio, podrá contar con sus principales hombres, después de confirmarse que Gerrard está recuperado de sus problemas en el cuello.