Enganchado a las drogas desde los 14 años

rocede de una familia modesta de El Puerto compuesta por once hermanos. Entró en el mundo de las drogas con 14 años y en el momento de su detención -en el 95- vivía en la calle y era politoxicómano. Tenía dos hijos, una niña de una primera relación que vive con su madre y un niño cuya custodia asumió su hermana menor, ya que la que era su mujer también era drogadicta. Ahora tiene 47 años y cumple una condena desde el año 1995. En 1997 la Audiencia lo condenó a dos penas de 18 años por agresión sexual. Ingresó en Puerto II y desde el 2000 está en la cárcel de Topas (Salamanca) donde trabaja en el taller de carpintería. Está previsto que salga en el 2010, al reducir pena por buena conducta.