Zapatero refuerza con Bernardino León Gross la proyección exterior para este mandato

La proyección exterior de España será uno de los ejes que impregne la política de José Luis Rodríguez Zapatero en la presente legislatura y, para ello, el presidente del Gobierno ha decidido reforzar este ámbito en su equipo más cercano de colaboradores con el nombramiento de Bernardino León Gross, hasta ahora secretario de Estado de Asuntos Exteriores, como secretario general de la Presidencia (con rango de secretario de Estado). Una designación que se hizo oficial ayer durante el Consejo de Ministros extraordinario que fijó la estructura organizativa del nuevo Ejecutivo.

La solvencia y la discreción -cualidades muy necesarias para desempeñar su nueva función- demostradas como número dos de Exteriores han abierto a este diplomático malagueño las puertas para entrar en el núcleo duro de la Moncloa, donde coordinará y organizará la actividad, exterior e interior, del jefe del Ejecutivo, al que prestará asesoría diplomática para fortalecer su imagen exterior.

Y es que estos próximos cuatro años van a tener «un carácter internacional muy marcado», según fuentes cercanas a León Gross. En este cuatrienio a España le tocará su turno de presidencia de la Unión Europea (UE), se conmemorarán los bicentenarios de América Latina y Estados Unidos contará con una nueva Administración tras las elecciones presidenciales del próximo noviembre. «Este horizonte exige una conexión más estrecha y reforzada entre la política exterior y la Presidencia del Gobierno, que estará muy encima de estos desafíos», agregaron las fuentes.

León Gross, que sucede en el cargo al veterano diplomático Nicolás Martínez Fresno, declinó hacer declaraciones en el día de ayer pero fuentes cercanas a él señalaron que ha recibido su nombramiento como «un desafío enorme» al tratarse de un puesto de gran responsabilidad y de una importancia clave en el «engranaje de la arquitectura institucional del país».

Además, su designación es también relevante para Málaga. Tras la confirmación de Magdalena Álvarez como ministra de Fomento, la incorporación de este malagueño al centro neurálgico de mayor confianza de Zapatero refuerza, sin duda, el peso de la provincia.

«Con el trabajo y el compromiso con la ciudad y la provincia de Magdalena Álvarez, Bernardino León y el resto de cargos y diputados de la provincia harán que esta sea una buena legislatura para Málaga», subrayaron las fuentes. Una idea en la que incidieron otros dirigentes socialistas de la provincia consultados por este periódico, que destacaron la figura y la proyección de León Gross, quien ocupó el décimo puesto en las listas electorales del Partido Socialista de Málaga al Congreso de los Diputados en las pasadas elecciones generales del pasado 9 de marzo.