Rafael de Paula: «Últimamente he sido un poco rebelde»

Rafael de Paula abandonó ayer las clínica Santa María de El Puerto donde permanecía ingresado desde que el pasado domingo sufriera un infarto de miocardio. El diestro jerezano fue sometido en los últimos días a diversas pruebas de fuerza por parte del equipo médico que lo ha atendido. Los facultativos certificaron la rápida recuperación del torero, que ahora deberá someterse a un tratamiento específico y modificar notablemente sus hábitos de vida.

En ese sentido, Rafael de Paula, que descansa ya en el domicilio portuense de su hermana, confesó ayer en declaraciones a la LA VOZ que «en los últimos tiempos he estado un poco rebelde en el sentido de que no me he cuidado lo que debiera, pero eso va a cambiar». El genial torero, una leyenda para los aficionados de todo el mundo, relató de la siguiente forma lo ocurrido el pasado domingo: «Estuve en un tentadero en Antequera con Morante de la Puebla. Estuve toreando de salón, pero hacía mucha calor y sudé una barbaridad. Además, fumé más de la cuenta y ya por la noche cuando estaba en casa tomé unas pastillas para dormir y empecé a sentirme mal».

Agradecido

Paula quiso mostrar a través de este medio su más sincero y emocionado agradecimiento por las muestras de cariño e interés por su estado de salud que ha recibido a lo largo de la semana. «Quiero agradecer por mediación vuestra a todos los aficionados y compañeros de profesión lo bien que se han portado estos días porque no puedo llamarlos personalmente uno a uno».

Entre las llamadas y visitas que ha tenido desde su ingreso en la clínica están las de Morante de la Puebla, Curro Romero, David Luguillano, Moraito, Fernando Terremoto y otros muchos representantes del mundo artístico y taurino que se han preocupado por la evolución de un hombre ciertamente querido en muchos lugares de España.

En cuanto a sus sensaciones, el torero jerezano fue muy explícito: «Yo soy el primero que me he asustado muchísimo con lo que me ha pasado, aunque gracias a Dios todo ha salido bien dentro de la gravedad que tenía el tema». Aún así, Rafael de Paula quiso recalcar que ahora se encuentra «muy bien y muy tranquilo».

A Rafael de Paula le esperan ahora unas semanas de relajación y descanso, y después podrá seguir haciendo una vida prácticamente normal, aunque para eso tendrá que cambiar determinados hábitos poco saludables como el tabaco y perder algo de peso haciendo ejercicio.