Calle Porvera | Toda ayuda es poca
Si el Xerez Deportivo se salva de la quema será un milagro, algo sobrehumano. El giro que ha dado la situación ha sido espectacular, pues pocos -prácticamente nadie- confiaban en la resurrección de un equipo que alguno de sus jugadores, que su propio presidente, veían en Segunda División B. No estoy de acuerdo con esos que dicen que aún no se ha logrado nada, porque, de momento, se ha dado un paso más que importante. La llegada de Esteban, la nueva actitud de los jugadores o la inyección de fortuna han influido de manera decisiva para que esta misma semana los xerecistas estén en disposición de salir de los puestos de descenso. Pero aún hay más...
Actualizado: GuardarSerá en Motril. El Escribano Castilla estará coloreado por más de mil almas azulinas y por la resplandeciente sonrisa de una niña que apoya desde el cielo. Y es que esta misma semana tuve la ocasión de escuchar en La Jugada, programa de Canal Sur que se realiza desde Sevilla, las palabras de Juan José Cortés, padre de la difunta Mari Luz. Ese hombre no habla, pone los vellos de punta a base de cordura. El chaquetón del Recre con el que tanto se le ha visto buscar desesperadamente a su pequeña delataba su pasión por el fútbol. Una afición que, obviamente, ha quedado durante todo este tiempo en segundo plano.
Juan José, que es entrenador del fútbol base, volvió a su banquillo el pasado fin de semana, volvió a ser el míster del Pinzón, conjunto de Regional Preferente, y durante la entrevista que le realizaron desveló su buena amistad con Emilio Viqueira. El centrocampista azulino, tuvo el bonito detalle de mandarle una camiseta del Xerez con el nombre de Mari Luz. Una azulina más que empuja fuerte desde el cielo.
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