El comercio gaditano
Hoy se habla mucho de Cádiz ciudad del comercio; es cierto, pero no es nuevo. De siempre nuestra ciudad disfrutó de un extraordinario comercio de todos los tipos. En realidad no existían grandes superficies, ya que todavía no habían proliferado en nuestro país. Pero, sin embargo, tuvimos unos buenos locales comerciales, algunos con más de tres plantas, como por ejemplo La Riojana, en la calle Compañía, o Almacenes Amaya, en la plaza de San Juan de Dios, hoy perteneciente al Ayuntamiento.
Actualizado: GuardarRecuerdo cuando en las vísperas de la fiesta mayor que existía en Cádiz, el Corpus, cuando todo el mundo estrenaba ropa, cerraban las puertas casi al filo de la medianoche atendiendo al público. Los Almacenes Hermu (hoy Zara), tienda con mucho caché y con extraordinarias telas de todo tipo, surtían de todos los enseres de ropa a los barcos que se hacían en Astilleros. Los Almacenes Barcelona, en la plaza de la Catedral, La Catalana, en la calle de la Pelota...y muchos más harían que la lista fuera interminable.
Había muy buenas tiendas de muebles, con extraordinarias exposiciones de ello, de manera que el mueble se compraba en la exposición. Hoy ya todos han desaparecido debido a las grandes superficies, bien situadas en la provincia o fuera de ella.
Hubo un comercio muy emblemático en Cádiz que fue Crédito Rucas, en la calle Columela. Este negocio tenía sucursales en nuestra provincia y fuera de ella, como Sevilla. Probablemente fue pionero en nuestra ciudad en la venta a plazo, aparte de ser de los negocios más surtidos en su género. Sus dueños eran la Sociedad formad por PRuiz y Castaño.
No olvidemos la gran cantidad de puestos de trabajo que generaba este tipo de comercio gaditano.