El Ayuntamiento quiere retrasar la fecha de celebración del Gran Premio

El Ayuntamiento de Jerez comenzó ayer la ronda de contactos pertinentes con el fin de analizar la reciente celebración de la Motorada y estudiar aquellos aspectos a mejorar de cara a la próxima edición. La alcaldesa, Pilar Sánchez, se reunió con representantes del comercio local y la hostelería, y como primera medida a llevar a cabo acordaron adelantar el cierre del calendario del Gran Premio, cuya fecha esperan esté concretada para finales del próximo otoño. Ello les permitiría un mayor margen a la hora de organizar el evento, que desde Alcaldía confían en que se retrase hasta los meses de mayo o junio.

«Queremos que no sea sólo cinco días después de Semana Santa ni a dos semanas del Gran Premio de Portugal, como ha ocurrido esta vez -explicó Sánchez-. Lo ideal sería más avanzada la temporada, a final de abril o incluso en mayo o junio, cuando el clima fuese mejor, y que tampoco coincidiera con los últimos días del mes, que es cuando los bolsillos se resienten». Otra de las cuestiones que se abordaron en el encuentro fue la de crear una mesa permanente donde participen todos los sectores implicados en la organización de aquello que rodea al Mundial, esto es, Consistorio, vecinos y empresarios, que comenzaría su andadura tras la Feria del Caballo.

La edil se congratuló de dicha iniciativa, que supondrá una participación mucho más efectiva de los afectados en la consecución de la Motorada. Además, aprovechó para anunciar que «hemos elevado el perfil del visitante», refiriéndose al hecho de que el aficionado actual, aunque venga incluso en menor medida, está más dispuesto a gastar su dinero en los servicios que le oferta la ciudad, sentenciando que «el gamberro no tiene cabida». El resto de las fuerzas participantes en la reunión de ayer también ofrecieron su punto de vista sobre la misma y, en especial, sobre los aspectos de mejora para la próxima edición del campeonato.

Manuel García, presidente de la Asociación de Unión de Comerciantes, Asunico, valoró de forma muy positiva el encuentro, argumentando que «se han escuchado todas las voces implicadas». En cuanto a las ganancias de los pequeños empresarios, García subrayó que «ha habido de todo», por lo que instó al Ayuntamiento a que comience a plantearse la posibilidad de acabar con el blindaje de calles en el centro. Antonio Real, presidente de la Asociación Provincial de Hoteles, también tachó la primera toma de contacto de «muy constructiva», y aunque no adelantó gran cosa sí aseguró que su colectivo, que no ha resultado especialmente perjudicado por la marcha de moteros, hará alguna que otra propuesta, «aunque pensamos que el modelo actual no se quitará».

El presidente de Horeca, Antonio de María, resaltó ante todo que «nuestro objetivo es que se siga celebrando el Gran Premio en Jerez, y lo demás es secundario». No obstante, reconoció el varapalo que ha supuesto este año la menor afluencia de aficionados en la ciudad para la hostelería, argumentando que tan sólo siete establecimientos de los 88 a los que ha encuestado la asociación se ha mostrado satisfecho con las ventas. Por ello, apostó por la apertura de parte de la ciudad, aunque siempre consensuado con los propios moteros.

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