Un bulo vía SMS provoca una oleada de inmigrantes en la oficina de Extranjería
La propagación de un mensaje entre la comunidad extranjera de toda España aseguraba que en las dependencias de Cádiz se otorgaba fácilmente «la estancia indefinida en el país»
Actualizado: GuardarDecenas de inmigrantes prodecedentes de distintos puntos de España comenzaron a llegar el pasado martes a Cádiz para regularizar su situación. ¿La razón? Un SMS difundido entre los círculos de inmigrantes que informaba de que en la Subdelegación del Gobierno de la capital estaban dando los añorados papeles «con rapidez». Un bulo que se agrandó con el conocido boca a boca.
Desde primera hora de la mañana de ayer, a las puertas de las oficinas de Extranjería de la calle Acacias, se agolpaban centenares de saharauis y senegaleses en su mayoría haciendo largas colas, en la falsa creencia de que podrían legalizar su estancia indefinidamente, según informó a este periódico un empleado de la Subdelegación del Gobierno. «Según hemos podido saber por lo que nos dicen las personas que estamos atendiendo, el rumor asegura que en esta capital andaluza se ha abierto un proceso extraordinario de legalización, lo cual es totalmente falso. La oficina está abierta como cualquier otro día del año, pero no estamos haciendo una regularización. Es un bulo que ha salido por internet. Hay personas que están viniendo desde Valencia e incluso el Sáhara y que han dormido en coches. Es una pena porque han gastado el poco dinero que tienen para poder venir hasta aquí por una simple broma de alguien. Llevo 18 años trabajando aquí y es la primera vez que vivo una situación de este tipo. Hay algunos que han venido desde Las Palmas», decía mientras observaba con incredulidad la fila de gente. Una cola que según otra trabajadora «daba la vuelta a la manzana a primera hora de la mañana».
La falsa noticia lleva dos días circulando entre los círculos de comunicación habitual de estos colectivos y «ha empujado a muchos a hacer cola ante la citada dependencia en la falsa creencia de que podrán legalizar su estancia en territorio comunitario, por eso tememos que mañana (hoy) aún venga más gente», decía uno de los agentes de la Policía Nacional al tiempo que era increpado por los inmigrantes para que les dejase pasar.
Desconcierto
Entre la comunidad extranjera el desconcierto era total. Brahim, un joven de 25 años que vino en barco desde Argelia hace dos años no podía contener las lágrimas. Más atrás, Hamadi con su prima «muda y sorda», denunciaba el trato recibido por el personal. «Lo que queremos es que nos dediquen un poco de tiempo. Hemos dormido aquí», decía aferrándose a su carpeta.
Según el personal de la oficina de Extranjería es difícil saber a ciencia cierta el número de inmigrantes irregulares que existe en la provincia. Sin embargo, el dato de extranjeros empadronados permite realizar una estimación de la cifra de inmigrantes sin papeles, contrastándolo con los extranjeros que poseen actualmente una tarjeta de reisdencia. En la provincia residen 24.503 extranjeros que disfrutan de esa documentación, lo que permite deducir que al menos 12.000 personas viven en los distintos municipios gaditanos de forma irregular. Una cifra que asociaciones de ayuda al inmigrante como Pro Derechos Humanos cree que se queda corta. «La población de extranjeros empadronados va en aumento mucho más rápido que los que tienen tarjetas de residencia. Eso pasa porque el empadronamiento es fundamental para acceder a una serie de servicios sociales básicos. Pero aún hay un mayor número de inmigrantes, que podrían contarse por miles, que no se reflejan en ningún lado porque tienen miedo de empadronarse», explica el presidente de la entidad.
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