El Problema

Sé cuál es nuestro problema, lo hemos detectado y vamos a poner remedio». Tan enigmática declaración de Calderón a la prensa el pasado martes dio lugar a todo tipo de rumores en los círculos cadistas, desde los que mantenían que la negativa trayectoria del equipo cadista era intencionada, al objeto de mantener el interés por la liga hasta el final de temporada y así poder abarrotar el nuevo Fondo Sur en los últimos 4 partidos en casa, hasta los que aseguraban que la falta de coraje en la gran mayoría de los jugadores se debía al hecho de tener que jugar en pantalones cortos, habiendo exigido a través del correspondiente comité de empresa, la sustitución de tan anacrónica y sexista prenda por un recatado chándal que cubriera completamente sus peludas extremidades, recalcando que lo contrario es inconcebible en pleno siglo XXI y no gusta ni a la Tata Pepa. Bromas aparte, lo cierto es que uno se esperaba, tras la penosa actuación en tierras canarias, y una vez detectado el supuesto problema, que los once escogidos por el míster salieron ante el Elche con las ideas bien claras. Cualquier cosa menos la actitud de los jugadores durante toda la primera parte, volviendo a caer en los mismos errores y demostrando similar desgana y apatía que en ocasiones anteriores. Tuvo que sufrir un percance una voluntaria de la Cruz Roja al saltar con la camilla al terreno de juego para que afición y equipo, de forma conjunta y solidaria, despertaran del letargo y animaran el cotarro durante algo menos de 30 minutos, pues en el último cuarto de hora cedimos otros dos puntos, tras echarse los jugadores inexplicablemente para atrás. Y con este panorama llega el derbi, decisivo para el Xerez e importante pero no trascendental para un Cádiz en la zona de los mediocres. Espero tres puntos y que Calderón dé con el problema, porque si no serían bastantes los que pensarían que el problema es él. Suerte.