La Casapuerta | Ya empezamos
Cuando todavía no llevamos un mes tras la celebración de las elecciones, en el horizonte está fermentando una nueva borrasca política con negros nubarrones. La barca zozobra y empieza a hacer aguas. Las formales y rotundas promesas de los dirigentes en tiempo de captación de votos se tornan agridulces y la gente de a pie se pregunta si ya empezamos. Sí, ya empezamos a cometer errores y a jugar al juego de la oca con los gaditanos para distraernos de sus desvíos y desencuentros. Ahora resulta que el tan cacareado Museo de Carnaval se parece más a un cuento chino que a una realidad de futuro. Por lo que se ve y se imagina, el manoseado Museo dormita en el lecho de la ignorancia y la desidia y, una vez más, hay que hacer un nuevo Plan General de Ordenación Urbana, que se ha que dado obsoleto después de 13 años de vigencia Y el resultado es un lío padre que no logramos entender los sufridos contribuyentes.
Actualizado:La Junta y el Ayuntamiento caminan en distintas direcciones y empiezan a distanciarse en detrimento de Cádiz. Cómo estará la cosa que el arquitecto que ganó el concurso de ideas, Rafael de Giles, se queja abiertamente al Ayuntamiento de no haber recibido aún el proyecto ni de atender sus peticiones. La Junta, por otro lado, donde dijo digo, dice Diego, y la borrasca se va fragmentando hasta que estalle y nos quedemos sin Museo de Carnaval después tanto machacarnos el coco. Por unos y por otros, se quedará la casa sin barrer y como casi siempre ocurre con las cosas de Cádiz, aquí no pasa na. Esto es un cachondeo. Es el mismo cachondeo que se tiran con la plaza multiusos. Esto sólo pasa en Cádiz, en la ciudad que sonríe... por no llorar. Es triste y lamentable que la clase dirigente nos tenga tan poco respeto y se cachondeen de nosotros con lo viejos que somos. Cádiz no aguanta más promesas electoralistas sin cumplir. ¿Ya empezamos!