¿Dónde está Wally?
Actualizado: GuardarCuando era una mocosa (y de eso no hace tanto) me encantaba buscar a Wally. Mi hermana y yo nos tirábamos horas pasando las páginas de los libros creados por el británico Martin Handford a la caza y captura de ese hombrecito moreno con gafas y con camisa a rayas rojas y blancas que parecía ser un aficionado del Atlético de Madrid, como Mochano. A veces llevaba sombrero a juego con su atuendo y en otras ocasiones portaba en sus manos algún elemento que lo hacía formar parte del entorno en el que se encontraba, lo que dificultaba su búsqueda.
Ayer me acordé de ese entrañable personaje justo en el momento en el que mis compañeros y yo nos pusimos a buscar moteros por la ciudad. ¿Es qué no hay? ¿Dónde se han metido? «Hay unos cuantos en la avenida de Arcos y en Ifeca», me indicaba Almudena. Y es que este año parece que se los ha tragado la tierra. Mucho hablar de que las calles de Jerez se colapsan, de que la ciudad se trasforma en el eje de Andalucía occidental en estas fechas, de que se preven miles de desplazamientos... pero a la hora de la verdad la capital de las motos está vacía.
El motivo parece ser el cerrojo que nuestra alcaldesa, Pilar Sánchez, ha dado a la ciudad. Ha conseguido acabar con las fiestas que rodeaban al Gran Premio de Motociclismo, y eso parecía algo imposible. Reconozco que siempre estuve en contra de que la ciudad estos días fuera un lugar sin ley para los moteros. Había que tomar medidas, pero ni tanto ni tan poco. Acotar el centro es un error que este año lo hemos pagado todos muy caro. Los bares del centro cerraron el viernes tempranito y las tiendas cercanas a mi urbanización (que siempre se quedaban sin productos) están más tranquilas que cualquier otro fin de semana. Sin olvidar el varapalo que esta «gran medida» ha supuesto para Torremelgarejo.
Eso sí, para nuestra alcaldesa este fin de semana habrá sido todo un éxito. Desde luego...