Un Xerez con acento inglés

Más que Xerez, es Sherry. Los azulinos han adquirido un importante toque británico con la llegada de Esteban Vigo al banquillo. No especialmente por el estilo o el sistema de juego, sino por la media inglesa que lleva a raja tabla últimamente. Tras el desconcertante acercamiento y las pruebas de los primeros partidos, el Xerez se ha abonado a la media inglesa y le viene dando continuidad desde hace cuatro partidos. Dos victorias (Celta y Málaga) y dos empates (Nàstic y Sevilla Atlético) que han dado un poco de oxígeno a unos xerecistas que caminaban moribundos hacia la Segunda División B.

La paciencia está siendo una constante en un vestuario que alterna un paso largo, con uno cortito, pero siempre avanzando y dejando síntomas de una recuperación defensiva, que era fundamental para continuar peleando por la permanencia. El Deportivo regresa otra vez con un agridulce sabor en el paladar. Viajó de vuelta a Jerez nuevamente con esa extraña sensación que se trajo de Tarragona. Con un punto que comenzó siendo mucho más, pero que acabó pudiendo ser mucho menos.

El empate en el Sánchez Pizjuán fue justo, pues ninguno de los dos conjuntos hizo especial mérito para guardarse los tres puntos, pero tras el triple pitido final del colegiado ninguno abandonó el terreno de juego con una buena sensación. De hecho, el discurso que se escuchó en los bajos de Nervión fue un calco de las declaraciones que se realizaron en el Nou Estadi: «Este punto hay que hacerlo bueno el próximo partido».

Y es que el vivido ayer en Sevilla fue un duelo soso, aburrido, cargado de bostezos, sin ritmo, sin demasiadas llegadas al área, con contadas ocasiones de gol. Uno de esos encuentros en los que ambas defensas se acaban imponiendo a los ataques y en el que por encima de todo se trató de impedir que el rival jugara cómodo.

Ni al Sevilla Atlético ni al Xerez se les notó a gusto sobre el tapete de Nervión. Los azulinos arrancaron sin prisas y poco a poco fueron metiendo marchas. Pero lo hicieron con calma, pisando bien el embrague, dando un fácil pase atrás antes que un largo cambio de juego, tocando en una zona sin riesgo antes que desbordando por banda. Pedro Ríos fue uno de los que más lo intentó durante la primera parte por su carril. El jerezano fue la principal fuente de creación y de peligro de un Xerez que no lograba contactar con Yordi. Esta vez, las jugadas de estrategia a balón parado, fueron las únicas vías por la que el isleño se acercó al gol. Yordi y Moreno tuvieron dos ocasiones calcadas –remate de cabeza tras falta tocadita de Viqueira desde la frontal–, pero ninguna encontró puerta.

En la segunda parte apareció Momo. Fue un flas, un par de fogonazos que sirvieron para que los azulinos se adelantaran. El canario trazó una diagonal arrancando desde su carril izquierdo para acabar asistiendo a Pedro Ríos. Perico definió perfectamente, puso por delante al Deportivo y si no lograron llevarse los tres puntos es porque el filial sevillista reaccionó rápido. Confeccionó una jugada de tiralíneas, en la que a Momo le faltaron las fuerzas, y de un certero cabezazo colocaron nuevamente las tablas en el marcador.

Empate que no deja de ser justo por más que Pedro Ríos o Francis gozaran de un par de ocasiones para volver a poner al Xerez por delante.

Esta jornada puede que el punto no sirva demasiado, pero si dentro de siete días vuelve a aparecer el Sherry, tocará victoria, se le ganará al Cádiz y los azulinos continuarán con la media inglesa.

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