«Este teatro es la envidia de otros muchos lugares»
'La hija del regimiento', de Donizetti, «es estupenda para todos los públicos» y para «iniciarse en la ópera» La obra, una nueva producción propia del Teatro Villamarta, se estrena el próximo jueves en el coliseo jerezano
Actualizado: GuardarEl Teatro Villamarta estrena el próximo jueves una nueva producción propia en colaboración con la Consejería de Cultura. Se trata de La hija del regimiento, de Gaetano Donizetti, que cuenta con la dirección escénica del malagueño Javier Hernández.
-Su trayectoria profesional está muy relacionada con el Teatro Villamarta porque ha trabajado en otras obras.
-Sí, en bastantes. Podemos decir que mi maestro es Francisco López y he trabajado muchas veces con él de ayudante de dirección. Así que es algo que agradezco muchísimo pero que es una responsabilidad intentar acercarme a la calidad de las producciones realizadas en este teatro. No es la primera producción que dirijo pero sí es la primera de tanta enjundia. En ese sentido es la que más responsabilidad me causa. Me han dado esta oportunidad, este dardo envenenado que yo agradezco y me da alegría y responsabilidad. Este teatro es la envidia de otros muchos lugares de Andalucía.
-¿Cómo van los ensayos?
-Siempre falta tiempo pero no nos podemos quejar porque trabajar con velocidad es una constante. Los cantantes, el coro, el ambiente... son estupendos.
-En el reparto hay nombres importantes como Sabina Puértolas y José Luis Sola.
-Hay nombres muy importantes. Es un reparto muy joven pero de artistas con una gran proyección internacional. Estoy contentísimo con él porque es otro de los grandes repartos que este teatro tiene la habilidad de realizar frecuentemente. El maestro Udaeta -en la dirección de la Orquesta Filarmónica de Málaga- es estupendo, llevamos muchos meses hablando del concepto de la obra y cómo lo vamos a trabajar, cosa que otras veces no sucede.
-¿De qué manera es actual el argumento de La hija del regimiento?
-Es un argumento muy ligero, de vodevil, en el que predomina la diversión y el optimismo. La música de Donizetti es maravillosa porque subraya todas las facetas de la obra: conmueve, divierte, juega... Es una música ligera, liviana, vaporosa, elegante. La ópera es una unión de música y texto y evidentemente en este caso la música tiene una gran relevancia, muy por encima del texto. Y claro que la obra es actual. Yo quiero subrayar en esta obra el aspecto de la tolerancia en el sentido de que la convivencia es posible puesto que la obra se desarrolla en un marco un poco bélico -aunque en seguida queda difuminado- donde se hace posible un amor imposible entre una chica francesa criada de forma inverosímil por un regimiento y el chico del pueblo. Al final vencen todas las dificultades.
-¿Qué ha sido lo más difícil a la hora de montar esta obra?
-Cuando te enfrentas a una obra como director tienes que buscar un punto de vista desde el que contar la obra, qué aspecto vas a subrayar y cuál no. En este caso he buscado una clave cultural cercana a nosotros. La obra transcurre en los primeros momentos de la ocupación francesa -la original está ambientada en la misma época pero en las montañas de El Tirol- y la hemos trasladado a un lugar indeterminado de Andalucía. Respetamos que los soldados sigan siendo franceses -aquí como curiosidad van a ser marineros- y toda la nobleza que aparece es española. Es algo que nos ayuda a contar la obra y la historia aunque evidentemente la obra no tiene nada que ver con la política. Es la historia de un amor entre los protagonistas que vence una serie de dificultades.
-¿Es una buena obra para iniciarse en la ópera?
-Por supuesto. Aquí se han reducido mucho los diálogos hablados, y sería un equivalente a nuestra zarzuela. Esto favorece la inmersión del espectador en una obra en la que la música sigue teniendo un peso importantísimo. Y combina muy bien una serie de elementos patéticos, en cuanto a que tocan la fibra sensible y emocional del público. Esta obra abunda en esos elementos con arias y romanzas de la soprano y el tenor. Es una obra estupenda para niños y para todos los públicos. Hace falta gente joven en la ópera, en el teatro... Hay que animar también a la ciudad a que apoye el proyecto del teatro, que sepan lo que tienen, que es una joya.
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