La consejera de Medio Ambiente, Fuensanta Coves, presidirá el Parlamento de Andalucía

Fuensanta Coves Botella se convertirá el próximo 3 de abril -fecha de la sesión constitutiva de la VIII Legislatura- en la séptima presidenta en la historia del Parlamento de Andalucía. Manuel Chaves, secretario general del PSOE andaluz, tomó esta decisión el viernes por la noche y la propuesta se hará oficial mañana, tras la reunión de la comisión ejecutiva regional del Partido Socialista en Andalucía.

La mayoría absoluta de la que gozan los socialistas, tras las elecciones del 9 de marzo, no dejan lugar a la sorpresa. Coves, actual consejera de Medio Ambiente en funciones, sustituirá de esta manera a María del Mar Moreno, que ha llevado esta responsabilidad durante la última legislatura, tras ser la primera fémina en ocupar la más alta instancia de la Cámara autonómica andaluza.

Los socialistas debían también decidir quién se iba a hacer cargo de la portavocía antes del pleno constituyente de la nueva legislatura, en la que por primera vez cincuenta escaños estarán ocupados por mujeres. Al final han optado por la continuidad de Manuel Gracia Navarro, que ya ejerció este mismo cargo en la legislatura pasada y que tan buen resultado le dio a su formación, sobre todo, durante la compleja reforma estatutaria. Manuel Gracia, por su parte, se mostró ayer «ilusionado» y se comprometió a no escatimar esfuerzos para realizar un gran trabajo. Añadió que la nominación le produce orgullo y satisfacción, sobre todo porque han sido sus propios compañeros de partido quienes le han emplazado a seguir otros cuatro años al frente de la portavocía parlamentaria, si bien prefirió esperar hasta mañana para, una vez que compruebe si se le ratifica en el cargo o no, «hablar de grupos de trabajo y de planes de futuro».

Asimismo, María del Mar Moreno se apresuró ayer a desearle suerte a su sucesora, a la vez que reiteraba que ella había expresado hace meses a los dirigentes socialistas su deseo de iniciar una nueva etapa. ¿Cuál será su destino? Ningún alto cargo de los socialistas andaluces se atreve a desvelarlo. Existen tres posibilidades: más poder orgánico, una consejería o formar parte del Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero.

Moreno ya llegó a ser 'número dos' del partido en Andalucía, con lo que parece que su reto es afrontar responsabilidades institucionales. Habrá que esperar, al menos hasta el 14 de abril -día de la toma de posesión de Manuel Chaves como presidente de la Junta de Andalucía- para conocer el futuro político de María del Mar Moreno.

También habrá novedades en la composición de la Mesa del Parlamento. Al PSOE le corresponden cuatro puestos en proporción a sus 56 escaños, mientras que el PP -con 47- tendrá tres e IU, uno.

El PSOE quiere que Marisa Bustinduy, secretaria general de los socialistas malagueños, ocupe una de las vicepresidencias del órgano de toma de decisiones de la Cámara autonómica. Se mantendrá en la Mesa tanto el secretario provincial del PSOE de Granada, Francisco Álvarez de la Chica, como al diputado por Cádiz José Luis Blanco.

Bustinduy, que ocupará el lugar en esta terna de Petronila Guerrero, vicepresidenta segunda de la Mesa en la última legislatura y actual presidenta de la Diputación Provincial de Huelva.

«Un orgullo»

Bustinduy, que está pasando un mal momento interno tras perder como candidata las elecciones municipales de 2007 y no lograr que su partido obtuviera más parlamentarios que los populares en las autonómicas del 9 de marzo, recibe el apoyo de la dirección regional socialista por su fidelidad al partido.

La secretaria provincial del PSOE de Málaga, Marisa Bustinduy, ha afirmado que será un «honor» representar a la provincia de Málaga en la Mesa de la Cámara del Parlamento de Andalucía y ha asegurado que aún desconoce el cargo que ocupará en la misma porque no se ha tratado esta cuestión.

Señaló, igualmente, que su elección constituye un «orgullo» y una «responsabilidad» frente a su partido y a los ciudadanos malagueños a los que representará en el Parlamento autonómico y ha añadido que afronta el reto con «mucha ilusión».

Su cargo definitivo dependerá de la negociación con el resto de formaciones con representación parlamentaria.