E.ON aprueba comprar los activos de Endesa por 11.800 millones
La alemana descarta pujar por Iberdrola, que se encuentra en el punto de mira de la francesa EDF
Actualizado: GuardarEn el primer tramo de la sesión dominaron las dudas: los mercados se debatieron entre los números rojos y los verdes. Pero, a partir de media sesión, los inversores se inclinaron claramente por las ventas. Y los mercados del Viejo Continente no regresaron al terreno de los avances ni cuando Wall Street abría al alza, a pesar del indicador de confianza de los consumidores que elabora la Universidad de Michigan, y que apuntó hacia una mayor debilidad.
Y todo porque la eléctrica alemana E.On metió miedo. La compañía adelantó en una reunión con analistas que el crecimiento de su beneficio bruto se situará en la parte baja de la horquilla propuesta. Como el sector energético se considera un refugio para tiempos de crisis, debido a la recurrencia de sus ingresos, esta advertencia sentó especialmente mal en los mercados. E.On perdió un 2,47%. Y en España, las tres eléctricas cotizadas también sufrieron un abultado castigo: Iberdrola perdió un 2,13%, Endesa, un 1,87%, y Unión Fenosa, un 1,32%.
Pero es que, persisten las inquietudes: el euribor a un día ha marcado un nuevo máximo anual y el Banco Central Europeo ha anunciado una serie de subastas a largo plazo con el objetivo de normalizar el funcionamiento del mercado de dinero en la zona euro. En Estados Unidos, la Reserva Federal tomaba una medida similar.
De este modo, el Ibex-35 registró un descenso de un 0,71%, hasta los 13.442,40 puntos. La alemana E.ON ya está aquí. Tras fracasar en el objetivo de hacerse con Endesa, se conformará, al menos de momento, con ser la cuarta eléctrica nacional, con una cuota de mercado que rondará el 10% en 2010 y que pivota sobre la generación y el mercado de la pequeña Viesgo.
Directivos de la compañía, liderados por el primer ejecutivo, Wulf Bernotat, aseguraron en videoconferencia con analistas que, tras adquirir los activos de Endesa en el marco del acuerdo suscrito con Enel y Acciona, sólo alimentan el proyecto de crecer en España de forma orgánica, y no van a pujar por Iberdrola, la compañía en el punto de mira de la francesa EDF.
E.ON ha dado por buena la valoración que los bancos de negocio han realizado de los activos de Endesa en una transacción que ha experimentado una serie de ajustes finales. La alemana pagará 2.030 millones por Viesgo, (hasta ahora en poder de Enel), excluida la participación del 50% en Enel Unión Fenosa Renovables, y 9.070 millones por la propiedad de Endesa en la filial italiana (80%) y la francesa (65%), cifras que incluyen la asunción de deuda correspondiente.
Sumados otros activos, el importe total a desembolsar por la empresa germana asciende a 11.850 millones de euros, que financiará con bonos y otros instrumentos financieros. Los ejecutivos de E.ON no se mostraron alarmados por la diferencia de cuantía con las estimaciones iniciales de 10.000 millones de euros. Reconocieron que el sector energético ha experimentado cambios. La operación se llevará a cabo en el plazo de unas semanas, el tiempo necesario para ultimar los flecos pendientes.
Batalla eléctrica
La operación es fruto del acuerdo firmado en abril de 2007 entre E.ON y la italiana Enel y la española Acciona, por el que el grupo alemán se retiró de la puja por Endesa a cambio de determinados activos de la eléctrica española y Viesgo, filial en España de Enel
E.ON no piensa competir en la 'batalla eléctrica' que se avecina en España, pero -tal vez haciendo de la necesidad virtud- se muestra satisfecha por el potencial obtenido tras resultar derrotada en la batalla por Endesa. La compra de activos que ahora lleva a cabo es la segunda mayor transacción que la compañía realiza en su historia, y tiene, según Bernotat, una importante proyección de futuro.