
Luis Parra actuaba en la operación como «un intermediario con comisión»
Joaquín Morales desvela todos los entresijos de la operación de compra-venta con el grupo del jerezano Además, el mandatario azulino carga contra aquellos medios «que están siendo crueles»
Actualizado: Guardar«Se acabó el no ser vehemente y claudicar». Comienza la mano dura en la regencia azulina de Joaquín Morales. El presidente azulino salió ayer al paso de las declaraciones realizadas hace dos semanas por el empresario jerezano Luis Parra y desveló los entresijos de una operación de compra-venta que terminó en nada. Además, el constructor nazareno aprovechó para pedir unidad en unos malos momentos del xerecismo, así como cargar contra aquellos que él entiende «están detrás dando por culo, con perdón de la palabra».
Una oferta menor
Tal y como adelantó ayer LA VOZ, Morales desveló que la oferta que puso el grupo representado por Luis Parra sobre la mesa no pasaba de los dos millones de euros: «El día que conozco al señor Jesús Prudencio me dice que de cinco millones nada, un millón en cinco años, y que inyectar dinero al Xerez poco porque tiene una empresa pequeña y no puede gastar más de lo que tengo». Así fue el final de una operación en la que Luis Parra llevaba el mando «como un intermediario que actuaba por comisión». De hecho, el pasado martes volvieron a reunirse Parra y Morales en Sevilla, donde el jerezano amplió la oferta a tres millones de euros, algo que desmintió el propio Jesús Prudencio al presidente del Xerez.
Poca solvencia
Sin embargo, no era este el problema de un Morales que incluso parecía a estar dispuesto a perder dinero en esta operación. Según el nazareno, la falta de garantía financiera del grupo representado por Parra fue suficiente para decir que no a un proyecto que necesitaba de mayor apoyo económico. Y es que el propio Morales reconocía ayer que «el Xerez necesita mucho dinero. Tiene unos compromisos adquiridos que tiene que cumplir y te puedo asegurar que Joaquín Morales ya no puede más porque yo en mis empresas lo estoy pasando mal». De hecho, el mandatario azulino espetó que «el dinero que he podido inyectar en el Xerez ya lo he inyectado, y si quisiera inyectar más no lo puedo hacer porque no tengo». Además, el presidente azulino también sacó a la luz que dentro de toda operación de compra-venta «hay una cláusula a aquel que quiera comprar que había de firmar sí o sí a que el Xerez jugara en Jerez. Si Joaquín Morales hubiera sido un pesetero habría cogido ya los millones que ha puesto».
Apoyo al equipo
Hasta ahí la versión doctor Jekyll de un Morales que pronto sacó su versión Mr. Hyde. El nazareno pidió apoyo y respeto al equipo, ya que «últimamente algunos medios de prensa se están explayando, están siendo crueles, echándole cuenta a cualquier chichinabo que llega por aquí menos al que se deja aquí la vida, con sus fallos, muchos, pero es el que hay». Y es que el presidente de la entidad entiende que «estoy en un momento en el que voy a ser contundente, educado porque así me criaron mis padres, pero no voy a dejar que nadie se pase ni con el Xerez ni conmigo. Esto es un mensaje para los que están detrás, cuatro por ahí que no sirven ni para estar escondidos y están calentando, provocando, rayando coches, y eso es de ser un cobarde, y a mí no me va a achantar nadie».
Y es que el mandatario denunció que «antes todo era palmaditas y mensajes de ánimos, y ahora hasta hay algún mensaje de guasa en el móvil».
Ya para acabar, el nazareno quiso pedir disculpas «Juventudes Xerecistas, creo que desde el comunicado hemos dejado claro cuáles son nuestras intenciones».
bfernandez@lavozdigital.es