La crisis complica el nuevo convenio de la construcción para 80.000 trabajadores
Los sindicatos piden mejoras salariales y la ampliación de la jornada de verano Los empresarios replican que sólo podrán ofrecer el aumento tipo sobre el IPC
Actualizado: GuardarEl Cuervo marca la frontera entre las provincias de Sevilla y Cádiz en el transcurso de la Nacional IV. Pero el cartel de bienvenida al pueblo no sólo fija el acceso a suelo sevillano, sino que también acarrea otra consecuencia en el bolsillo de los ciudadanos. Sólo por vivir al otro lado de ese cartel, un peón de la construcción recibirá al mes unos 80 euros más que otro trabajador de la misma categoría de este lado. Es lo que fija al menos el salario bruto fijado por cada convenio provincial en el sector de la construcción: al año, un gaditano del nivel más básico en esta actividad cobra 15.404 euros; un sevillano, 16.391.
Esta discriminación salarial será uno de los aspectos que más polémica sembrará en la negociación del nuevo convenio colectivo de la construcción para la provincia de Cádiz, que este año se presenta especialmente complicado a causa de la crisis económica. Más de 80.000 personas dependen de lo que acuerden las partes sociales a partir de ahora. El anterior acuerdo (que se firmó en octubre) expiró el 31 de diciembre de 2007 y las primeras tomas de contacto para la renovación se desarrollaron a principios de mes. Hasta ahora, ha habido dos reuniones muy preliminares y tanto empresarios como sindicatos marcarán en breve la fecha de una tercera cita más concluyente.
«Sabemos que no están las cosas para exigir mucho, pero creo que sería lógico que existiera una mayor homogeneización en las categorías más bajas», defienden con las mismas palabras Antonio García (de UGT) y Antonio Barrena (de Comisiones Obreras), que buscan «una verdadera negociación y no una prórroga». Eso sí, y aunque la primera intención es la de renovar el convenio durante sólo un año, CC OO no se cierra a nada, «y si se acuerdan avances reales no tenemos problema para firmar un acuerdo más largo, pero no queremos hipotecarnos con un texto a la baja y que luego la economía vuelva a tirar», explica Antonio Barrena. El secretario general de los promotores y constructores de Andalucía y de Cádiz, Emilio Corbacho, ha admitido que «este año vamos a tener muy poco recorrido en la negociación del convenio» y tan sólo conceder la mejora adoptada en el convenio nacional, es decir, un alza de la inflación prevista (del 2%) más 1,5 puntos.
Antonio García (UGT) replica que son los primeros en comprender la situación, «pero cuando las cosas iban bien tampoco quisieron mejorar nuestras condiciones y en algún momento tendrán que afrontarlo». Básicamente, los representantes de los trabajadores lucharán en dos frentes. Por un lado, en la homogeneización de los salarios entre las provincias, y así evitar la fuga de empresas aprovechando los convenios más baratos del vecino; y por otro, en la ampliación de la jornada reducida de verano de los dos meses actuales a tres.
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