Semana Santa y turismo
Después de las vacaciones de verano, las más importantes son las que se disfrutan durante la Semana Santa. Los datos sobre desplazamientos de vehículos suministrados por la Dirección General de Tráfico lo avalan: tres millones y medios de en Andalucía y 16 millones en el conjunto del país. Las cifras son muy significativas y revelan, entre otras cosas, un determinado grado de bienestar. Su repercusión en la economía de numerosas localidades es evidente, sobre todo en el sector de los servicios. En el corto plazo de una semana la hostelería tiene la oportunidad de compensar los desequilibrios económicos sufridos a lo largo de los meses anteriores originados por el carácter estacional del turismo en la provincia.
Actualizado: GuardarJunto con el turismo tradicional de sol y playa -el que seguramente genera más divisas en España-, existen otros tipos de turismo que cada vez adquieren mayor importancia. El turismo rural, por ejemplo, viene experimentado durante estos últimos años un fuerte tirón e incluso llega a superar los problemas de estacionalidad que afectan a otras actividades turísticas. El turismo de congresos, el turismo cultural, el llamado turismo de ciudad, el turismo náutico y el de cruceros... se promocionan por las distintas administraciones y experimentan un crecimiento paulatino en muchas poblaciones españolas. Pero hoy quisiera referirme a un turismo que se podría denominar de Semana Santa, es decir, aquél que se siente atraído por las manifestaciones religiosas y de arte que se prodigan a lo largo y a lo ancho de nuestra geografía alcanzando su máximo esplendor en dos ciudades andaluzas: Sevilla y Málaga. Pienso que en este aspecto, Cádiz tiene mucho que ofrecer.
La semana santa gaditana ha mejorado sensiblemente durante los últimos quince o veinte años a pesar de sus famosos y potentes carnavales que paradójicamente constituyen, per se, el antídoto contra Doña Cuaresma. Se cuenta con una buena imaginería, con una organización que se va perfeccionando a medida que pasan los años, con estrenos de categoría y buen gusto que nada tienen que envidiar a los de de otras ciudades... y sobre todo con el entusiasmo de muchos jóvenes que se incorporan a las cofradías gaditanas como penitentes o cargadores.
No hay ninguna ciudad en España que en Semana Santa pueda presentar una oferta turifica tan especial como la de Cádiz. Por la mañana se puede disfrutar de la playas, magnificas playas urbanas, aunque este año el tiempo no acompaña demasiado y por la tarde de los desfiles procesionales que encuentran su marco adecuado en las calles de un casco histórico de singular belleza, único en Andalucía. Así parece entenderlo nuestros numerosos visitantes porque según información de última hora él grado de ocupación de las plazas hoteleras es más que notable.
En su día se pusieron en marcha dos planes hoteleros que han dado los resultados apetecidos. Ahora hay que promocionar esas peculiares características de nuestra Semana Santa para incrementar aún más el número de visitantes.