el ciudadano apoya la pac
En el último mes ha bajado un 0,1 por ciento en el IPC de los alimentos, mientras que el general subió un 0,2 por ciento. Bueno para el consumidor, pero con diferente valoración para el agro, en concreto para los ganaderos de ovino. Esta bajada del IPC se ha debido en gran medida a la bajada del 7 por ciento en los precios de esta carne, que ya tiene pocas posibilidades de sostener esta vertiginosa caída. Un sector tocado por la bajada de consumo, por las substanciales importaciones de países como Australia o Nueva Zelanda y por la creciente escasez de capital humano, con muy poca capacidad de relevo generacional. ¿El motivo? El poco atractivo profesional, económico y laboral que muestra este subsector a las potenciales nuevas vocaciones. Las soluciones pasan, según la Comisión, por una reorientación presupuestaria a través del artículo 69 o con desarrollo de medidas de desarrollo rural. Algo ya conocido y escaso. También se ha confirmado la subida de cuota láctea en un dos por ciento. La Ministra de Agricultura ha manifestado sus dudas sobre lo que puede implicar, aunque prevé que supondrá un aumento de la capacidad productiva española y un mejor posicionamiento para 2015. El sector no lo tienen tan claro. La ganadería se ha globalizado y la política agraria tiene poca capacidad para amortiguar las fluctuaciones de los mercados. Más liberalismo, pero menos estabilidad de precios.
Actualizado: GuardarEntre tanto, según los datos publicados por el Eurobarómetro de la Comisión, menos de la mitad de los europeos conocen la existencia de la PAC, y solo un tercio sabe más o menos en qué consiste. Pero algo tiene de positivo. Casi el 60 por ciento defiende que este presupuesto hay que mantenerlo o aumentarlo y alrededor del 45 por ciento ve con buenos ojos esta política, un 8 por ciento más que el pasado año. Y es que la subida de precios ha hecho pensar a muchos consumidores que la dependencia exterior de algo tan cotidiano como el alimento es igual o peor que la dependencia energética.