Valdelagranase protege de la Motorada

La urbanización de Valdelagrana se ha convertido, en todas y cada una de las ediciones de la Motorada, en el talón de Aquiles del municipio. El plan de tráfico puesto en marcha en el 2006 prohíbe el acceso motorizado al casco histórico de El Puerto. Además, el control de la Policía Local en el centro impide que los moteros realicen sus acrobacias e infracciones. Sin embargo, en Valdelagrana ocurre todo lo contrario. El paseo Marítimo queda cerrado a cal y canto, pero algunos aficionados realizan carreras y acrobacias por el resto de la urbanización. El Ayuntamiento ha colocado badenes en las principales avenidas y ha acotado varios accesos.