Fallo en el montaje
Actualizado:l artefacto de Logroño no estalló por un fallo en el montaje: el iniciador no prendió el cordón detonante que debía hacer estallar los 61 kilos de amonal y cinco litros de gasolina que había repartidos en dos ollas soldadas al maletero. De hecho, los investigadores consideran que el atentado del viernes pasado en Calahorra es muy similar a los desarrollados por este comando en Logroño y Durango, tanto en el modus operandi como en el tipo de artefacto explosivo, Los diez meses trascurridos desde entonces y los quince atentados ejecutados por el grupo, dos de ellos fallidos -delegación de Defensa de Logroño y juzgados de Getxo-, demuestran, según ha reconocido el propio secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, que se trata de «una estructura estable». Los expertos antiterroristas consideran que Martitegi y Goikoetxea viven a caballo entre el País Vasco y el sur de Francia, donde se repliegan tras los atentados, y que pueden ser ellos mismos quienes crucen la frontera con los explosivos y los coches-bomba que necesitan para sus crímenes.