Un punto que sabe a victoria para un Virgili que resurge en la segunda mitad

El Virgili consiguió un punto que invita a soñar. Si antes del encuentro un punto servía de poco, después de ver cómo se desarrolló, la importancia de lo conseguido es vital. Los amarillos tuvieron la posesión del balón, realizando un ataque con mucha paciencia ante una defensa nazarena muy ordenada. En todo momento el partido parecía controlado y, aunque los gaditanos sufriesen la expulsión de Óscar Rugama, tiraron de casta y la defensa con un jugador menos fue impresionante, manteniendo el marcador a cero. Se estaba llegando al descanso y una jugada que podía llevar peligro se convirtió en una contra mortal que supone el 0-1 materializado por Mané. Sin tiempo para reaccionar llegaba otro duro golpe con el 0-2 por la escuadra de Leo con el que se llegaría al final del primer tiempo.

En la segunda parte, Del Amor falla delante del portero y a renglón seguido, Ferrandis consigue el tercero tras aprovechar un rechace delante de la meta de Wilfred. Al resultado en contra se le unió la quinta falta de equipo a los cinco minutos, lo que restaba algo de intensidad en defensa. Los recientes fantasmas volvían a aparecer en la pista gaditana pero Wilfred detiene un doble penalti que, posteriormente, sería el momento clave para que Jesulito se echara a hombros a su equipo y consiguiera dos goles en sendas acciones brillantes con Toni y Adri Gaona

Juanito, por la escuadra

Cuando quedaban tres minutos, al técnico Juan Carlos Gálvez no le queda otra que introducir portero-jugador. La acción dio sus frutos y, tras una buena elaboración Juanito, jugador del filial, consigue el gol de la tarde al introducir el balón por la escuadra cuando se quedaba casi sin ángulo. El delirio de la afición y del equipo fue incrementando a medida que se acercaba el final. El punto mantiene intactas las opciones de salvación de los gaditanos.