Perder el Tranvía
EResulta sorprendente que sólo el 65% de los ciudadanos de la Bahía tengan claro que quieren un tranvía. Sin duda, nada es tan falso como el refrán de que "a caballo regalado no se le mira el diente", por supuesto que se le mira, tanto que por eso la donación es un acto que necesita la aceptación del que recibe el regalo. Algo parecido está pasando con el Tranvía que la Junta nos quiere regalar porque, siendo en principio una magnífica noticia, lo cierto es que los municipios afectados no están dando saltos de alegría, ya que el regalo viene con condiciones: la Junta impone el recorrido.
Actualizado: GuardarEn Cádiz, que nos vendría de muerte, el problema es por dónde circula y sobretodo por dónde entra. Me temo que dentro de tres años vamos a tener un pedazo de puente terminado y un tranvía y diez mil coches esperando para entrar en Cádiz a que Ayuntamiento y Ministerio de Fomento se pongan de acuerdo si se accede por arriba o por abajo de la rotonda del corteinglés. Tampoco tenemos muy claro cómo enlazará con el nuevo puente.
En San Fernando es donde el regalo ha generado mayor tensión por las consecuencias que su trazado, por la calle Real, puede provocar en el tráfico, de modo que no es descartable que cuando la obra, made in Junta, se eternice sobre esa vía vital, surja un movimiento insurgente antitranvía que integre a un buen numero de ciudadanos desesperados.
En Chiclana también quieren el tranvía, pero tampoco se ponen de acuerdo sobre su recorrido. La Junta quiere que vaya por la calle de la venta El Pájaro y el Ayuntamiento responde que por ahí el tranvía, los coches y el Canario, no caben todos a la vez.
En fin, espero no ver el día en que sus obras, eternamente inacabadas, terminen convirtiéndose, dentro de 20 años, en otra vía verde como la de la Sierra, pero por el Parque Natural de la Bahía. Por el bien de los gaditanos, por una vez, podrían sentarse, hablar y llegar a un acuerdo.