OBRAS. Las obras del futuro Teatro de la Tía Norica continúan a buen ritmo a pesar de que el proyecto ha sufrido varias modificaciones para compatibilizar la construcción del edificio con los importantes restos arqueológicos / ANTONIO VÁZQUEZ
Cultura

El Teatro de El Cómico reservará una sala bajo el escenario para que se visiten los restos

El Ayuntamiento descarta la idea de la planta falsa y habilita un espacio de 120 metros cuadrados, que contará con entrada propia, para mostrar los hallazgos arqueológicos El resto del sótano contará con suelo transparente y las prospecciones podrán continuar

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Los arquitectos del Ayuntamiento de Cádiz tenían sólo unos meses para lograr la cuadratura del círculo. Los importantes restos arqueológicos descubiertos en las excavaciones del solar de El cómico obligaron a los promotores a reformar el proyecto original para construir el nuevo Teatro de la Tía Norica, hacer compatible el cumplimiento de los plazos de la obra con la seguridad de los edificios colindantes y preservar, además, los hallazgos.

Tres tipos de intereses (urbanísticos, cívicos y patrimoniales) igualmente válidos, pero aparentemente encontrados en esta ocasión, que los técnicos han logrado unificar gracias a un paquete de medidas entre las que se incluye la habilitación de una sala de 120 metros cuadrados, con entrada propia, en la que los restos «más destacados» serán visitables.

Según fuentes municipales, la planta falsa, originalmente proyectada para que pudieran continuar las prospecciones, se ha descartado, ya que «los restos fenicios se encuentran localizados a unos niveles de tal profundidad que no permiten esta opción».

En cambio, se contempla crear un espacio practicable debajo del sótano para que los «arqueólogos puedan continuar las excavaciones», que contará con «una salida a la vía pública y una rampa de acceso». La idea permitirá a los investigadores avanzar en sus trabajos de forma independiente a la construcción del edificio, de modo que ambas no se obstaculizarán. La nueva cimentación responde, según estas mismas fuentes, «a un modelo consensuado con los técnicos de la Consejería de Cultura de la Junta».

Esta segunda versión del edificio reformado mantiene la opción de hacer accesible los restos al público. En primer lugar, mediante el acondicionamiento de los bajos del escenario como una singular sala de exposiciones. De esta forma, la Tía Norica podrá presumir de ser el único teatro del mundo en el que la acción dramática transcurre sobre un auténtico tesoro histórico. El resto del sótano contará con un suelo registable transparente, que permitirá una visión de conjunto de los restos fenicios. A pesar de estas modificaciones, desde el Ayuntamiento insisten en que la dotación original de las instalaciones, al igual que la distribución de las estancias y «todos los servicios imprescindibles para la propia actividad del teatro se siguen atendiendo». La única parte del edificio afectada, lógicamente, es la que ahora ocuparán los hallazgos puestos en valor, una zona que anteriormente tampoco tenía una utilidad definida.

La otra gran diferencia con respecto a la primera planificación se refiere al capítulo económico. El coste total de la actuación prácticamente se ha duplicado. De una inversión de 4 millones de euros se ha pasado a un presupuesto de 7.900.000 euros.

Proyecto definitivo

Integrado en las iniciativas del programa CulturCad, el proyecto definitivo prevé la construcción de un inmueble de 1.960 metros cuadrados con capacidad para 315 personas. En el piso más bajo, de 540 metros cuadrados, se ubicará una sala de exposiciones y otras dependencias de montaje y ensayo de representaciones. En la planta baja, además de la recepción, se encontraría el patio de butacas con capacidad para 208 asientos y el escenario, toda una obra de precisión, que se elevará desde el sótano permitiendo diversas posibilidades. La primera planta constará de un anfiteatro que completará el aforo con 108 asientos más. Para la segunda planta, los arquitectos han dispuesto espacios destinados a los camerinos y las oficinas.

El Teatro Estable de la Tía Norica se encuadra en el proyecto global de la Ciudad del Títere, en la que también se ubicará una escuela taller, un museo y un centro de documentación de las artes escénicas.

Complemento necesario

El Teatro será el lugar natural para la exhibición del repertorio propio de la Tía Norica, que se irá incrementando a partir de la recuperación de su legado histórico y artístico, y con las incorporación de nuevas creaciones. También servirá como complemento a los otros espacios escénicos existentes en la ciudad, del que se beneficiarán los diferentes programas que configuran el calendario de actividades de la ciudad.

De esta forma se liquida definitivamente la polémica que estalló el 29 de junio de 2007, cuando la Junta de Gobierno del Ayuntamiento decidió aprobar la paralización de las excavaciones. Según el responsable municipal, Antonio Castillo, entonces se determinó «remitir un escrito a la Delegación Provincial de Cultura, en el que se advertía de una posible afectación futura de los edificios colindantes, en caso de que continuaran las prospecciones». «No hay que ser alarmistas -explicó el concejal- porque se trata de una posibilidad que no se da en el estadío actual de los trabajos, pero que aconseja no seguir avanzando».

No obstante, la Junta rechazó esta decisión y recordó que los trabajos arqueológicos debían continuar hasta que así lo decidiera la inspectora nombrada por la Dirección General de Bienes Culturales para la supervisión del proyecto, que es quien guarda «todas las competencias en la materia». «La excavación en dicho solar debe realizarse antes de continuar con las obras de cimentación para edificar el Teatro de la Tía Norica», apuntaron desde la Junta e insistieron en que «la legislación obliga al promotor de la obra, a presentar un proyecto arqueológico para evitar daños en posibles restos. dperez@lavozdigital.es