Las tres minorías religiosas cuentan con representantes parlamentarios
«Cristianos, zoroastrianos y judíos abandonan Irán debido a los problemas económicos, no a problemas con las autoridades». Yonathan Bet Kolia es líder de los cristianos asirios de la Iglesia caldea de Irán y ocupa uno de los dos asientos que los cristianos tienen reservados en el Parlamento. Las otras dos minorías religiosas reconocidas por las autoridades islámicas son la zoroastriana y la judía y cada una de ellas también cuenta con un diputado en la cámara.
Actualizado:Cerca de 180.000 personas forman parte hoy de estos tres grupos minoritarios reconocidos y conviven con una abrumadora mayoría musulmana chií. Reclaman igualdad de oportunidades para acceder a los puestos oficiales y ocupar cargos de responsabilidad en el Ejército, también exigen que se deje de tener en cuenta el precio de sangre (cantidad a pagar cuando se mata a una persona, que hasta hace poco era el doble por un musulmán que por un no musulmán), pero su mayor problema es, sin duda, la constante emigración de los miembros más jóvenes de sus comunidades.
Por encima de las cuestiones religiosas, que sus representantes oficiales insisten que son respetadas por las autoridades islámicas iraníes, se encuentra la falta de oportunidades en un mercado nacional sumido en una grave crisis económica y bloqueado desde los inicios de la revolución.
Refugiados en EE UU
Según un informe publicado por el diario The Washington Post, el Gobierno estadounidense ha promovido y financiado durante las últimas tres décadas el éxodo de las minorías de Irán a través de la organización hebrea HIAS (siglas en inglés de Asociación de Ayuda al Inmigrante Hebreo). En la última década 2.842 judíos han abandonado suelo iraní, por más de 18.000 cristianos y zoroastrianos. En estos momentos 10.000 iraníes estarían esperando el visto bueno de las autoridades para viajar a la oficina de HIAS en Viena y solicitar el estatuto de refugiado en Estados Unidos.
Durante la etapa reformista, Mohamed Jatamí trabajó por la pluralidad y el respeto a las minorías por considerarlo un punto estratégico de cara a las relaciones internacionales para rebajar la tensión en materia de derechos humanos. Pero los representantes de estas minorías, antes y ahora, son conscientes de que el Gobierno islámico trabaja por un país musulmán y chií.