Los retos económicos centran la cumbre de primavera de la UE
Los Veintisiete analizan desde hoy las dificultades financieras, el cambio climático y la energía
Actualizado:Los líderes de la UE acometen hoy en Bruselas un Consejo Europeo de escasas pretensiones y que será seguido mañana de unas conclusiones esencialmente económicas, que no parece vayan a aportar grandes novedades al debate en curso. La reunión, que se convoca todas las primaveras por estas fechas para pasar revista al estado de modernización de la economía europea tiene tres ejes centrales: la Agenda de Lisboa, con el recurrente repaso de las Grandes Orientaciones de Política Económica (GOPE), la problemática de la estabilidad financiera, con la referencia obligada a la crisis hipotecaria, y el cambio climático y sus complejas derivadas energéticas y de reparto de la carga en la reducción de emisiones del post-Kioto. Habrá, además, alusiones a cuestiones concretas de política internacional pero no se sabe aún, por ejemplo, si Oriente Próximo será objeto de conclusiones o no.
En la discusión sobre el cambio climático se impone, por su inmediatez, la condición previa de la separación de las redes de generación y comercialización de los gigantes energéticos europeos, que la Comisión ha planteado a los estados miembros y que Alemania y Francia rechazan abiertamente.
Flexibilización
El debate servirá para verificar si Berlín ha flexibilizado sus posiciones en esta materia, tras haberse declarado E.on dispuesta a seguir las indicaciones comunitarias, y enajenar su red de alta. La separación de redes debería ser acordada para este mes de junio, antes de acometer discusiones más complejas sobre el cambio climático, en particular el reparto de la carga para la reducción de emisiones de gases causantes del efecto invernadero.
Está abierto el debate sobre la política a seguir con los grandes consumidores de energía, a los que unas condiciones muy exigentes de la UE les podrían restar competitividad en los mercados internacionales. Las discusiones sobre la seguridad de aprovisionamiento darán pie a una puesta al día de las ambiciones europeas con Moscú.
El análisis sobre la situación económica y la crisis de liquidez resultante del hundimiento del mercado hipotecario americano será abordado por los Veintisiete desde el convencimiento de que los mecanismos con los que Europa se ha dotado para garantizar un desarrollo sostenible son adecuados.