Descartan que hubiese una necrópolis en el solar de Los Chinchorros de Cádiz

Sin misterio, la arqueología no sería tal. Pese a lo preciso de esta ciencia, en ocasiones los trabajos en el subsuelo de Cádiz producen sorpresas como la que se han llevado los investigadores del solar de Los Chinchorros, junto al antiguo cementerio de Cádiz. Por los hallazgos en otros solares contiguos, esperaban dar otro buen mordisco al descubrimiento de la necrópolis del Gades romano. No fue así. Las investigaciones han descubierto «un vacío» con pocos enterramientos y un probable uso industrial de entre los siglos I a. C. y I d. C.

Así lo confirmaba ayer la arqueóloga María Luisa Lavado, que desde noviembre dirige la excavación de los 3.700 metros cuadrados del solar. Reconoce que ha sido «una sorpresa» no dar con la necrópolis, dado que el terreno tenía «una gran intensidad» arqueológica. El potencial de la zona se lo daban los hallazgos en terrenos contiguos como el de Arcángel San Miguel, que ella misma excavó.

Sin embargo, los enterramientos romanos han sido «residuales si se tiene en cuenta la extensión del terreno». En concreto, se trata de cinco incineraciones y una inhumación. Además, han aflorado varios pozos, muchos actuales y dos de ellos romanos.

Suelo 'industrial'

La excavación no ha sido en balde. Debajo de la arena que cubría el terreno, Lavado anuncia que han aparecido restos de dos muros romanos en «muy mal estado» que podrían dar un giro a las teorías sobre la utilización de la zona. A falta de una interpretación final, Lavado adelanta que pudiera tratarse de un uso industrial o familiar de una explotación de arcilla.

La datación del hallazgo se mueve en la franja que va desde la primera mitad del siglo I a.C hasta el siglo II d.C. En esa época, los habitantes de Gades podrían haber extraído arcilla para la fabricación de cerámicas en un horno a no muy gran escala, ya que además se han encontrado fragmentos de cerámica.

Sin embargo, quedan aún incógnitas por resolver. La primera se desvelará cuando se termine de excavar una pequela parte de las esquinas del terreno y se finalicen los trabajos arqueológicos a medida que se coloquen las pantallas del edificio. Incluso, el resto de estructuras de esta posible industria podrían haber quedado debajo de uno de los inmuebles construidos en la Avenida, frente a la Iglesia de San José.

El proyecto está en manos de las promotoras Goncava y SyC95 y constituye una de las obras más importantes y complicadas de Extramuros. De hecho, los futuros propietarios de las viviendas sufren importantes retrasos en la entrega.

Cuando se finalicen, los edificios albergarán 171 viviendas, 93 de ellas de renta libre y 78 de promoción pública.

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