El analfabetismo y la gracia
D el analfabetismo y la gracia, afortunadamente, en Cádiz nada más que hemos tenido lo segundo. Después de unas manifestaciones de una tal señora Mato sobre el analfabetismo andaluz, debo decirle que Cádiz jamás fue ciudad que tuviera analfabetos. Siempre hemos disfrutado de buenos colegios, tanto públicos como privados. Escuelas de los Hermanos de la Doctrina Cristiana, Salesianos y Escuela de Aprendices para los que gustasen de aprender un oficio. De todos estos lugares ha salido gente preparada para más tarde ocupar cargos de empleados, funcionarios, comerciantes o trabajadores de las factorías de nuestra Bahía.
Actualizado:No digo que en algunas zonas rurales de nuestro entorno no hayan existido analfabetos, pero para buscar a los culpables de ello había que ir al entorno familiar o a los políticos de aquellos tiempos. En lo que atañe a la fama de ser gente con gracia, es cierto. Pero esta gracia innata en los gaditanos ha sido siempre ocurrente, fina y sin molestar a nadie. Viene esto a cuento por ese señor que actúa semanalmente en un programa de Canal Sur, con el presentador Quintero, donde toda la gracia de él está en decir que a los gaditanos les gusta muy poco el trabajo. Nada más lejos de la realidad. Quiero recordarle a este señor algunas cosas que se han hecho en Cádiz y por los gaditanos. Barcos, plataformas petrolíferas... no recuerdo que nada de esto se haya comprado en tiendas de veinte duros. Esta mano de obra de gaditanos que se hizo famosa en muchos lugares de España y del extranjero ha tenido que volver a emigrar por falta de trabajo en nuestra tierra. Pero sé de la buena fama de la que goza, sobre todo en Levante. Por eso repetimos que no tenemos analfabetos, no somos vagos y que la gracia no se hace a costa de los demás.