Los bomberos denuncian que el Consorcio está retirando mobiliario del parque

La tormentosa relación que mantienen los trabajadores del Parque de Bomberos de Jerez con el Consorcio ha escrito otro nuevo capítulo con la retirada de parte del mobiliario del recinto, que los profesionales han interpretado «como una represalia» de la empresa por sus continuas críticas a la gestión y al estado en el que se encuentra el retén jerezano.

Como han explicado fuentes de la Junta de Personal, «el Consorcio ha decidido retirar material que habíamos conseguido los propios trabajadores, como la nevera industrial que nos había cedido un colegio de Arcos. Cuando la alcaldesa estuvo visitando el parque, le contamos cómo estaba todo y cómo la mayoría de las cosas eran de segunda mano, y ahora el Consorcio nos retira la nevera argumentando que no es de ellos, ni ha pasado el control de Riesgos Laborales». Según estas fuentes, una vez que se lleven el frigorífico tendrán que esperar al compromiso suscrito por la dirección de reformar la cocina, lo que incluye, sin embargo, una nevera de pequeñas dimensiones que no responde a las necesidades de la plantilla.

Mientras tanto, «tenemos que trabajar en turnos de doce horas y cuando llegue el calor, no tendremos donde guardar los alimentos», lamentan los funcionarios. Lo que temen es que esto sólo sea el principio de una larga lista de elementos retirados, encabezados por la maquinaria del gimnasio facilitada por la Delegación de Deportes. «No nos cabe ninguna duda de que lo han hecho por eso, porque les ha molestado que hayamos expuesto al Ayuntamiento las necesidades del parque. Es como si cualquiera tiene problemas con su jefe y le quitan la máquina de café por eso».

Tampoco se han mostrado de acuerdo con las razones esgrimidas por los responsables, ya que aseguran que éstos también tienen la obligación de contactar con los delegados de los trabajadores en materia de Prevención de Riesgos Laborales cuando se tome una medida semejante, algo que no han llevado a cabo. A pesar de todos estos inconvenientes, los bomberos continúan adelante con el informe que están elaborando sobre las deficiencias del parque, y que será trasladado no sólo al Consorcio sino también al Consistorio, con el fin de que el Gobierno local sea plenamente consciente de la situación en la que se encuentran las instalaciones.

Otra de las cuestiones que reprochan a la empresa es que no se haya reunido con los representantes de los trabajadores, a pesar de que éstos solicitaron un encuentro a principios del mes de diciembre. «Quedamos en reunirnos las tres partes: nosotros, el Ayuntamiento y el Consorcio, pero seguimos sin tener noticia alguna. Hemos mandado varios escritos a la dirección, el último el pasado 5 de diciembre, y seguimos sin obtener contestación».

Lo cierto es que el desánimo se ha apoderado de los funcionarios, que no descartan adoptar medidas más contundentes si con ello logran solucionar alguno de los problemas del parque, partiendo fundamentalmente de la urgencia de una renovación profunda del inmueble y sus limitados recursos materiales, sin olvidar tampoco el tan necesario aumento de la plantilla de efectivos. «El parque se echará a la calle si hace falta, aunque primero tenemos que hablar con los bomberos y ver cómo se va desarrollando todo. Vamos a preguntarles qué quieren hacer, y si es necesario movilizarse lo haremos, adoptaremos todas las medidas de fuerza que sean necesarias».

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