Dayron Robles sufre un despiste mortal y se queda fuera de semifinales

Dayron Robles se enredó en las series matinales. El indiscutible favorito en los 60 m vallas cometió un error garrafal, impropio incluso para un joven de 21 años. El atleta más rápido del año salió de los tacos y pensó que Liu Xiang había saltado antes de tiempo, así que se frenó, se contuvo mientras los demás volaban ya sobre las vallas. Al darse cuenta de este despiste fatal reaccionó. Pero ya era tarde. Por una estúpida duda había arruinado sus Campeonatos del Mundo. Un invierno impecable, admirable, tirado a la basura. Cruzó la meta en 8.53, un segundo y dos décimas más lento que su mejor tiempo del año. Acto seguido se derrumbó. Liu Xiang, perplejo, intentaba consolarle. Pero no había forma. El cubano estaba desesperado, abatido. Se echó las manos a la cabeza y en un acto de rabia lanzó, incluso, sus gafas al suelo. El fallo es más grave porque hace dos semanas, en París, ya cometió la misma torpeza. Ahora sorprenden las declaraciones que hizo tras aquel traspié. «Mejor que me suceda en un mitin, así, seguro, ya no volverá a pasarme».