Verónica Forqué Estar en la cama con Banderas, deja el listón muy alto»

-(Risas) bueno, es que la verdad organizo mi vida para no tener que sufrirlos. Por ejemplo, cuando tengo que salir al supermercado o hacer cualquier recado, salgo a la hora de comer. De todas formas, yo no tengo que ir a la oficina todos los días, no es mi tipo de vida así que me los ahorro.

-Ha dicho que es una maruja de su casa, ¿qué detergente le lava más blanco?

-Sí, me gusta hacer cosas en casa, pero la que lava la ropa es Nines. Eso sí, cada vez que voy a la compra le llevo un detergente nuevo para variar.

-Su pareja es el director de cine Manuel Iborra ¿Se podría haber casado con un economista estresado que llegara a las doce a casa y le dijera ponme la cena?

-Bueno el amor es algo muy raro. Una se enamora y se enamora, pero yo estoy con el mismo hombre desde hace 26 años. Él es director de cine, escribe nos entendemos muy bien. Nos gusta mucho hablar de la profesión y hemos trabajado juntos. Aunque se estresa alguna vez, yo intento calmarle y le digo: tranquilo... Si no se le pasa le dejo y me voy a dar una vuelta. Es difícil intervenir en el estrés de los demás.

-¿Se llevan trabajo a casa?

-Sí, muchas. A veces nos reímos y otras discutimos.

-¿Y quién lleva los pantalones?

-Depende pero siempre tienen las de ganar los directores.

-En su palmarés hay goyas, premios Tp, fotogramas ¿se pone todavía nerviosa cuando dicen eso de y el premio es para ?

-En los cuatro goyas que tengo nunca he estado en la sala. Cuando me los dieron estaba en Cádiz, Venezuela, Santander . y no he podido recoger ninguno así que los nervios han sido menores. Pero estando nominada ya se pasa mucha ilusión. Se pasan nervios, sí.

-¿Por qué lo llaman amor cuando quieren decir sexo?

-Tal vez para callarnos. Para ver si nos llevan al huerto y la mayoría de las veces lo consiguen.

-Entre otros ha estado en la cama con Antonio Banderas, ¿eso pone el listón muy alto, no?

-(Risas) Sí, muy alto, muy alto.

-¿Qué es ser chica Almodóvar?

-Tener el honor de trabajar con él que es siempre estimulante y divertido. Tengo muchas ganas de repetir.

-Cuando dice Dios mío, ¿a quién o qué se refiere?

-No digo mucho Dios mío. Cuando hago mis oraciones particulares sí. Hay una persona ahí especial pero no se muy bien ni donde está, ni cómo se llama, ni qué forma tiene si la tiene

-Empezó Psicología, lo dejó por Arte Dramático pero no la terminó, es usted una actriz sin papeles...

-(Risas) Bueno es verdad. Siempre pienso en que la tengo que acabar pero entre una cosa y otra, nunca me pongo.

-Bueno pero ya con su carrera y su palmarés... digo yo que sacaría matrícula de honor, ¿no?

-O un cinco raspado. Nunca se sabe.