«No, no es lo mismo la izquierda que la derecha; ni Zapatero que Rajoy»
«Cádiz ya no es la Cádiz de 2004 ; tenemos un proyecto y necesitamos a cuantos más, mejor»
Actualizado: GuardarCuatro croquetas tuvieron la culpa de que Alfredo Pérez Rubalcaba (Solares, 1951) se quedara ayer fuera de juego. Una gastroenteritis inoportuna le dejó baldado en casa y colgado al teléfono. «Fue un vuelo horrible desde Santiago», se lamentaba. Tuvo que suspender todos los actos en Cádiz y esta misma entrevista. Un cuestionario por e-mail y una conversación telefónica salvaron su compromiso. «Espero estar mañana -hoy para el lector- en Cádiz, pero no es seguro». Y si no es posible, lo dice por adelantado: «Sé que los gaditanos irán a votar el domingo masivamente porque no le van a dar la razón al PP y a sus estrategias de la abstención».
-Una campaña tan dura termina pasando factura...
-Pues sí, la campaña ha sido muy movida. Pero no son cosas graves, simplemente tengo que pasar un día o dos en la cama y se me pasa.
-Ministro del Interior, asesor de Zapatero, número uno por Cádiz... ¿Cómo se sobrelleva una campaña desde perspectivas tan diferentes?
-Ha sido una tarea difícil. Una campaña complicada en la que he tenido que compaginar todas mis funciones. El hecho de ser número uno por la provincia de Cádiz me ha exigido mucho tiempo porque ya dije que venía a Cádiz a quedarme y creo que he empezado a demostrarlo. Por suerte, existen los teléfonos móviles y tengo dos equipos de primera.
-¿La encuesta publicada por LA VOZ vaticina la pérdida de un diputado del PSOE a favor del PP en Cádiz...¿Lo consideraría una derrota personal?
-Nunca he pensado que en política las victorias o las derrotas sean asuntos personales, aunque es inevitable que los sentimientos vayan por otro lado. No obstante, en este momento yo trabajo para mantener el excelente resultado del 2004, algo que es posible si todos los gaditanos y las gaditanas que prefieren a Zapatero antes que a Rajoy votan a Zapatero.
-¿Ha cambiado en algo su perspectiva sobre Cádiz?
-Desde el principio dije que en los últimos cuatro años se han sentado las bases de un proyecto de largo alcance. Después de esta campaña me reafirmo. La mayoría de las políticas que se han puesto en marcha en estos últimos años van a fructificar en esta legislatura. Obras de infraestructuras, políticas de reindustrialización, turismo, agua, energía que ya se han iniciado y que van a sustanciarse en los próximos años. Cádiz sabe ahora hacia dónde va porque ya no es la Cádiz de 2004. Ahora hay un proyecto que tenemos que acometer sumando a cuantos más, mejor.
-¿Qué puede aportar usted a Cádiz en caso de victoria? Sus colaboradores, como es lógico, dicen que ya se ha involucrado en la solución de más de un asunto...
Lo que hecho siempre en todos los puestos políticos que he ocupado: trabajar, mucho. Y sí, alguna gestión ya he hecho. En relación al hospital de Cádiz, al Parque de Las Aletas, por supuesto a los problemas del sector pesquero...
-Crisis industrial y de la construcción. Un cóctel explosivo para una provincia de 114.000 parados... Y Zapatero habla de pleno empleo como objetivo prioritario.
-Veníamos de un paro de un 23,8% en el Gobierno de Aznar y ahora tenemos cerca de un 15% de paro. La verdad es que en los últimos meses ha habido un repunte del paro por la situación económica mundial y por la crisis financiera en los Estados Unidos que ha puesto en dificultades a nuestro sector de la construcción. Pero lo cierto es que en estos cuatro años hemos demostrado que nuestras políticas reducen el paro. De hecho se han creado 90.000 puestos de trabajo. Y sobre todo, tenemos iniciativas para la provincia de Cádiz, que van a reducirlo más. Estamos hablando de la mejora de las comunicaciones, de los planes de reindustrialización , de la puesta en marcha de nuevos suelos industriales, como Las Aletas, el Parque Tecnoalimentario de Jerez y la ZAL del Campo de Gibraltar.
-Usted ha llegado a comentar lo difícil que le resulta repatriar a los inmigrantes ¿Qué medidas se van a adoptar para solucionar la entrada ilegal de inmigrantes por el Estrecho?
-Lo que tiene que quedar muy claro es que la entrada de ilegal de inmigrantes a través del Estrecho es sobre todo un drama humano, porque la gente se juega la vida y en el 99% de los casos es repatriada a sus países de origen gracias a las excelentes relaciones que tenemos con Marruecos y con Argelia. Hay que repetir una y otra vez un mensaje a quienes quieren venir a España: que no se pongan en manos de las mafias. Que si quieren venir a trabajar a España, a Europa, existen mecanismos legales, siempre en función de nuestra capacidad de empleo y de integración.
-Zapatero le pidió a Rajoy un compromiso para apoyar sin condiciones al próximo Gobierno en la lucha contra ETA. ¿Volverán a intentar negociar si vuelven al Gobierno? ¿Qué significa para usted que Rajoy se negara a comprometer su apoyo sin condiciones?
-No hay ninguna expectativa de diálogo con ETA en la próxima legislatura. Lo único que cabe esperar de ETA es que abandone las armas para siempre. Zapatero lo que expresó en el último debate es el compromiso del PSOE, gane o pierda las elecciones, de apoyar la política antiterrorista del Gobierno que elijan los españoles. En muchas ocasiones me he preguntado qué resultado habríamos obtenido los demócratas si Rajoy hubiera apoyado la política antiterrorista del Gobierno esta legislatura... Ahora tiene que explicar porque se niega a comprometer su apoyo sin condiciones para la próxima legislatura. Probablemente, porque no renuncia a utilizar el terrorismo como instrumento para hacer política. No han aprendido la lección.
--Usted es experto en química ¿Qué reacción cree que provoca Zapatero?
-La política no es muy científica, pero es incomprensible si no existe química con la ciudadanía. Zapatero la tiene, conecta con los ciudadanos porque transmite optimismo y modernidad.
-¿Y Rajoy?
-Es todo lo contrario. Rajoy emana tristeza y pasado. Los ciudadanos quieren políticos que resuelvan sus problemas y que miren siempre al futuro, y huyen de los pesimistas, de los agoreros y de los profetas del apocalipsis.
-¿Y Teófila?
-Pues no sé. Yo siempre la veo muy enfadada.
-¿Por qué hay que votar a Zapatero? ¿Y por qué no votar a Rajoy?
-El domingo hay que votar. No importa a quién, pero hay que votar. Bueno en realidad, sí importa a quién se vote... Porque no somos lo mismo. No es lo mismo dialogar que crispar, crear nuevos derechos sociales que recortarlos, defender la paz que apoyar guerras ilegales. No es lo mismo mejorar la seguridad ciudadana que quitar policías de las calles, integrar a los inmigrantes y reconocer sus derechos que considerarles delincuentes potenciales, invertir en educación que llamar analfabetos a los niños andaluces. No es lo mismo subir las pensiones o el salario mínimo que no hacerlo, potenciar la investigación biomédica que oponerse a ella... No, no es lo mismo la izquierda que la derecha. Ni Zapatero que Rajoy.
-En los tiempos que corren... ¿los ciudadanos necesitamos buena suerte, como dice Zapatero?
-Siempre he pensado que, en la vida, la buena suerte viene muy bien. Y por eso, como hace José Luis, se la deseo a todo el mundo.
-Pues eso. Buenas noches y buena suerte. -¿Qué ha supuesto para usted la carga emocional de ocupar el lugar de su amigo Alfonso Perales?
-Con este asunto he tenido una sensación agridulce. Me he acordado mucho, mucho de Alfonso y me he acordado de él sobre todo cuando he recorrido los lugares que tanto le gustaban y que en algunas ocasiones conocí de su mano. Pero siempre ha supuesto para mí un acicate. Alguien muy cercano a Alfonso me dijo no hace mucho que a él le hubiera gustado mucho que yo fuera su sustituto. He recordado muchas veces esa frase.