ESPAÑA

El cardenal García-Gasco, confirmado como el 'guardián' de la ortodoxia de los obispos

El arzobispo de Valencia presidirá en el próximo trienio la comisión episcopal para la Doctrina de la Fe, heredera de la Inquisición

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El cardenal arzobispo de Valencia, Agustín García-Gasco, de 77 años, será durante el próximo trienio el 'guardián' de la ortodoxia de los obispos españoles. La XCI Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal Española (CEE) le designó ayer presidente de la comisión episcopal para la Doctrina de la Fe, heredera de la Inquisición, una responsabilidad que había asumido en funciones en abril de 2007 tras el fallecimiento del obispo auxiliar de Madrid, Eugenio Romero Pose.

García-Gasco será, por tanto, el miembro de la comisión permanente del Episcopado encargado de «procurar que lo que se diga en la Iglesia, de palabra o por escrito (la doctrina), sobre el Evangelio salvador de Jesucristo responda de verdad a ese Evangelio tal y como lo entiende la Iglesia, la Esposa de Cristo a la que asiste el Espíritu de la verdad». «Dicho de otra manera: la misión de la Comisión doctrinal es promover la ortodoxia y velar por ella», reza el documento sobre este cargo insertado en la página web del Episcopado.

La especie de 'policía doctrinal' que presidirá García-Gasco ha sido asumida en el pasado por relevantes miembros del Episcopado, entre ellos el presidente saliente de la CEE y obispo de Bilbao, Ricardo Blázquez, que se mantuvo al frente de esta responsabilidad durante tres trienios, y el vicepresidente saliente y arzobispo de Toledo, cardenal primado Antonio Cañizares.

Relevancia

El cargo que desempañará el cardenal de Valencia, una de las 14 comisiones episcopales o 'ministerios' de que consta la CEE, goza de una especial de relevancia, como lo demuestra que el actual Papa Benedicto XVI lo desempeñó durante décadas en Roma durante el mandato del anterior Sumo Pontífice, Juan Pablo II.

Junto a Antonio María Rouco Varela, que ha vuelto a presidir el Episcopado, y el cardenal primado de España, Antonio Cañizares, García-Gasco ha integrado el 'tridente' eclesiástico que con más dureza ha criticado diversas de las leyes promulgadas por el Gobierno socialista durante la pasada legislatura.

De su ascendencia en el Episcopado da cuenta que fue el encargado, en julio de 2006, de organizar el V Encuentro Mundial de las Familias que tuvo lugar en la capital de su archidiócesis, Valencia.