Las obras

Jugar en Bahía Sur, nunca. El hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra, pero el pedrusco del Cincuentenario del Trofeo nos hizo pasar vergüenza a muchos, aunque otros prefirieron dejar de lado la dignidad y la historia para hacer caja. Si ese fue el espectáculo en las bodas de oro del Trofeo de los Trofeos, poco cabe esperar del año del Centenario, salvo alguna fiesta hortera y baratita del estilo de la improvisada con ocasión del último ascenso. Dudo mucho que el estadio esté acabado para el 2.010, pues no va a ser menos que la Plaza de Sevilla y el Hotel Valcarcel, y más aún cuando el Fondo Norte tenía un plazo estimado de ejecución de 14 meses (9 meses en el caso de la zona de graderío) a partir de Enero de 2.007, y miren ustedes como está el patio. Y dejo para el final el mayor problema. ¿Qué harán con nosotros, los tribuneros? Es de suponer que los más antiguos escogerán sitio, por supuesto en Preferencia, y con preferencia, valga la redundancia, respecto a los nuevos abonados de dicha localidad que vienen firmando desde hace cuatro años el no tener asegurada su plaza durante las obras del Carranza. Los demás, al Fondo Norte, y en uno y otro caso, pagando el mismo precio que los socios de la grada donde definitivamente se ubiquen y, fundamental, reubicándonos al finalizar las obras en el mismo sitio que ocupábamos en Tribuna, siendo ésta la clave que deben tener en cuenta nuestros dirigentes, los actuales y los que manden el año del Centenario. ¿Serán los mismos?. Esa era la quinta y gran pregunta.