«El ambiente del Festival de Jerez es único»
La periodista trabaja para la única revista de flamenco que se publica en alemán
Actualizado: GuardarEl de Susanne Zellinger es uno de los rostros conocidos del Festival de Jerez. No es que esta mujer nacida en Linz (Austria) se suba a los escenarios, sino que se ocupa de entrevistar a los que sí lo hacen para la única publicación escrita en Alemán que existe: la revista ¿Anda! Ahora trabaja durante el Festival aunque otros muchos años lo ha visto desde la barrera, como alumna de Javier Latorre o Isabel Bayón.
-¿De dónde le viene a una austríaca su gusto por el flamenco?
-Siempre la he tenido. Bailé durante muchos años. Lo primero que escuché fue un disco de Lole y Manuel que me llevó mi novio de un viaje. Desde entonces no he parado de descubrir cosas, de escuchar, de querer entender.
-¿Nunca se termina de aprender flamenco?
-Nunca. Eso es lo que me asusta porque a veces creo que entiendo un poquito y sé distinguir los palos, sé si se hacen bien o mal, y otras veces veo cosas y me doy cuenta de que nunca voy a terminar de aprender. Aunque también esto es lo bonito que tiene.
-¿Hace falta manejar el idioma para entender este arte?
-Yo creo que sí, pero hay mucha gente que dice que no y que incluso se puede cantar sin saber español. Para mí es esencial el idioma para entender una cultura, es expresión de ella.
-¿Cómo se vive en Austria la afición al flamenco?
-Aumenta poco a poco, aunque es lento. Ahora tienen la intención de hacer un pequeño festival en Viena porque aún no tenemos. Vamos a Dusseldorf o a Berlín. Ahora va a actuar allí Miguel Poveda. Cada mes hay alguna actuación.
-¿Le gusta más el baile o el cante?
-El cante, aunque lo primero que descubrí fue el baile porque es más simple. En mi tierra me llaman fernandista porque me encanta Fernando Terremoto. También me gustan mucho Esperanza Fernández y Mayte Martín.
-La tendencia entre los aficionados es comparar el Festival de Jerez con la Bienal de Sevilla...
-Me gusta más el Festival de Jerez. La organización es fenomenal, te cuida y te preparan todo. Te sientes bien desde el primer día.
-También dicen que el ambiente es mejor: las noches en las peñas...
-Eso es único. Y también lo que viene después de las peñas -ríe-. He vivido dos noches y no quiero salir más. La primera noche que salí estuve con el guitarrista El Cabeza, y la segunda, con Capullo, que no cansó de cantar durante cinco horas y en la calle, con sus primos haciéndole palmas. Fue una experiencia imborrable. Eso se va a quedar aquí -concluyó señalándose la cabeza.