El triunfo por la mínima del Tenerife deja al Alavés al borde de la zona de descenso
El Tenerife cosechó un exiguo pero justo triunfo ante un apocado Alavés que evidenció muchísimas carencias, sobre todo en ataque, puesto que sus jugadores fueron incapaces de crear claras ocasiones de peligro.
Actualizado: GuardarLas exigencias clasificatorias de los tinerfeños, tras las dos últimas derrotas consecutivas, les exigían desde un principio la búsqueda de una balsámica victoria con la que romper su actual momento de intranquilidad, por lo que ya desde un principio acometieron con insistencia el marco de Bernardo.
Nino, a los seis minutos ya inquietó la meta del Alavés con un disparo raso, pero el balón se topó con el palo izquierdo visitante. La suerte favoreció a los locales en el minuto 10, cuando Marc Bertrán batió a Bernardo con un cercano disparo, tras un remate previo de Juanma al que el portero sólo pudo responder con un apurado rechace.
Una vez superados los primeros veinte minutos, los pupilos de José María Salmerón supieron deshacerse de la presión a la que le tenía sometido su rival, ejerciendo un mayor control sobre el balón, sobre todo en la parcela central, pero sin lucidez ni peligro alguna en las proximidades de la meta de Juan Pablo. Así y con algo más de equilibrio en la posesión del balón se alcanzó el periodo de descanso.
En la segunda parte el Alavés mejoró y le fue ganando el terreno a su rival, lo que le permitió crear algunas ocasiones. Pero al final todos estos esfuerzos en ataque resultaron improductivos, tanto para tinerfeños como para vitorianos, puesto que las esporádicas llegadas a puerta de uno y otro fenecían en las manos del portero o se iban por la línea de fondo, manteniéndose así el consabido único tanto en el marcador a favor del cuadro insular.