« Merche No me he retocado nada: mi madre no me deja»

-A Merche le va la marcha, por supuesto. Me gusta salir y divertirme todo lo que puedo.

-Se llama usted igual que la mujer de Imanol Arias en Cuéntame. De entrada, Merche no suena muy comercial. ¿Le han pedido muchas veces que se lo cambie?

-Sí, pero no me da la gana. Es mi nombre. Ni Azucena, ni Amanda, ni Whitney. Soy Merche. Lo heredé de mi abuela, así que Merche hasta la muerte.

-Hace gala constantemente de su sangre carnavalera ¿Qué letrilla tararea, de vez en cuando, casi sin darse cuenta?

-¿Muchas! De Ángeles y Demonios, y de Los golfos... ¿Y ese mítico Caleta? Caletaaaaa.... (canta).

-¿Es usted consciente de que viste como una chica de 17 años?

-Porque puede permitírmelo ¿O no? Cuando quiero ponerme una minifalda, me la pongo. Y que quede bien clarito que me las voy a seguir poniendo mientras pueda. Eso no tiene nada que ver con que cante y componga. Es una cuestión de estilo, íntima y personal.

-¿Algún retoquillo?

-¿Ni uno, hijo mío de mi alma! Mi madre no me deja. Yo le digo: 'Mamá, si se opera todo el mundo, déjame que me coja un poquito de aquí, otro poquito de allí', pero no hay manera...

-En cierta manera ha roto usted moldes. Una cantautora sexy, sin taburete y con coreografías... ¿Eso le ha ocasionado más problemas que beneficios?

-Me ha traído más disgustos que otra cosa, para qué nos vamos a engañar. Hay gente que te rodea y te aconseja, de buen rollo, que cambies esto y lo otro... Pero yo no me dejo imponer. Mi identidad y mi personalidad están por encima de todo.

-Pero lo de teñirse de morena huele un poco a márketing...

-¿Qué va! Lo hice porque me apetecía. Como tantas y tantas mujeres.

-En casi todas sus canciones hay alguien que deja a alguien. Llora usted mucho, creativamente hablando.

-¿Y en la vida también! ¿Soy muy llorona, muy pasional! Se me escapan lagrimillas por casi todo, aunque sea para bien.

-¿Dejó muchos novietes por Cádiz?

-He tenido cuatro novios, tres de Cádiz y un catalán. A todos los he querido mucho y ellos me han querido mucho a mí. Nada de corazones rotos.

-Le escribió una canción a su madre y otra a su abuelo. ¿El resto de la familia espera su turno?

-Más o menos. Mis tías están todo el día ¿Sácame al escenario! ¿Escríbeme una canción!

-Estuvo mucho tiempo cantando en una orquesta. Si tuviera que volver a hacerlo, ¿se le caerían los anillos?

-Para nada. Si esto no me hace feliz, cojo los bártulos y me largo. Si tengo que cantar en una orquesta, allí estaré, con la cabeza bien alta.

-¿Mantiene el contacto con Cádiz? ¿Procura estar informada de lo que pasa por aquí?

-Todo lo que puedo. Llevo seis años en Madrid, pero me intereso por lo que sucede, claro. Soy gaditana y no quiero ni puedo olvidar esta ciudad.

-Una prueba: ¿Sabe quién es Francisco González Cabañas?

-Ummm ... ¿Tiene que ver con la música?

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