La preocupación por el paro sube y se distancia del resto de problemas
Actualizado: GuardarLA VOZ
El sondeo de Sigma Dos corrobora un año más que el paro sigue siendo el principal problema entre los andaluces. La percepción de crisis, agrandada en Andalucía por el parón en la construcción, ha hecho aumentar dicha preocupación. En el barómetro del pasado año el 58,9% de los andaluces consideraba el paro como el principal problema. Un año después lo es para el 66,7%.
Ni los datos positivos sobre el crecimiento de la economía andaluza, en torno a un 3,4%, ni la creación de empleo, que también ha seguido aumentando, contagian optimismo a los ciudadanos, que tras la desaceleración de los últimos meses ven el futuro con mayor inquietud. En esta tendencia, sitúan la economía como el segundo en la lista de problemas de la Comunidad, desbancando a la inmigración.
Paro y economía descuellan por delante de tradicionales problemas, como la sanidad y la inseguridad ciudadana. Incluso la vivienda con sus altos precios es sólo para el 9,9% de la población el principal problema de Andalucía. Figura en el sexto puesto del ‘ranking’ negativo de la Co-munidad. Sólo para los votantes de IU la vivienda es la tercera de las preocupaciones.
Muy lejos aparecen también asuntos que han suscitado grandes debates y quejas en la opinión pública y que es utilizado frecuentemente como arma arrojadiza contra los gobiernos. Es el caso de la inflación y los precios, que sólo preocupa a un 0,7% de la población, o el agua, con un 1,2% de preocupados cuando este año hidrológico es uno de los más secos. También la corrupción y el enchufismo obtienen una atención mínima en una legislatura donde se han destapado escándalos a nivel municipal como el ‘caso Malaya’. Es llamativo el ascenso de la agricultura en la tabla de problemas, probablemente por la situación de sequía.
Inseguridad
En todas las provincias el paro, la economía y la inmigración figuran en los tres primeros puestos salvo en Cádiz, donde el funcionamiento de la sanidad preocupa más que la inmigración, o Sevilla, donde lo es la inseguridad ciudadana.
Por edades, los más agobiados con el paro son los de 30 a 64 años; los menos, lógicamente, los jubilados de más de 65. Para los jóvenes, la vivienda preocupa más que la sanidad o la inseguridad ciudadana, mientras que para los mayores lo es esta última. Los precios son más tenidos en cuenta por los de mediana edad, que los colocan como un problema por delante de la vivienda, educación o infraestructuras.