Rajoy promete que «habrá agua para todos» en la cuenca mediterránea

El candidato del PP a la Presidencia del Gobierno, Mariano Rajoy, ha garantizado que "habrá agua para todos" porque él y su partido no quieren una España "de color amarillo, el desierto de Zapatero" sino una España "verde". Rajoy se ha comprometido a llevar a "Castellón, Valencia, Alicante, Murcia y Almería el agua que sobre después de cumplir los compromisos del Pacto del Agua y del caudal ecológico, la que se va al mar".

Tras afirmar que "habrá agua para todos", Rajoy ha acusado a José Luis Rodríguez Zapatero de no haber resuelto el problema del agua "en ningún lugar de España, ni en Aragón, ni en Cataluña, ni en la Comunidad Valenciana" y le ha reprochado al jefe del Gobierno que no haya hecho "nada" en materia de inmigración y en economía, un asunto en el que ha considerado que hay un "máximo descontrol".

El candidato del Partido Popular ha advertido a los votantes de que "Zapatero es un serio peligro para la economía y una amenaza real para los bolsillos de los españoles y la economía de las familias y puede llevarnos otra vez a los años 70". En referencia al último boletín económico del Banco de España, del que se extrae que la desaceleración a principios de año es "algo más pronunciada" que la de 2007, algo que, según Rajoy, lleva asegurando el PP "durante mucho tiempo: que el Gobierno ha tenido la mejor herencia económica que ningún Gobierno haya recibido y que la ha dilapidado".

El "síndrome de la Moncloa"

Mariano Rajoy ha criticado que "está muy bien aliarse con los planetas y con las civilizaciones, pero hay que ocuparse de la gente" y ha apuntado que Zapatero "tiene síndrome de la Moncloa antes de entrar en la Moncloa, ya que está absolutamente alejado de la realidad".

Tras afirmar que a pocos días ya de las elecciones generales se encuentra "bien, en forma", ha apostillado: "Soy ciclista, veo la meta, ahí está el sprint y tengo el mejor equipo que me va a preparar ese sprint, que sois vosotros".

El candidato a la Presidencia del Gobierno, Mariano Rajoy, ha estado después en Murcia, donde ha afirmado que "toca cambiar" después de cuatro años en los que se ha asistido al "teatro del absurdo, a un debate ridículo, a un esperpento" y "se ha puesto a prueba hasta la saciedad la infinita paciencia de los españoles" porque España "se merece un Gobierno sensato, previsible, con objetivos, que sepa dónde va y lo que quiere hacer".

"Con más ganas que nunca"

Rajoy ha dado las gracias a los militantes y dirigentes de su partido ya que gracias a ellos, ha subrayado, él está "con más ganas que nunca, con más fuerza que nunca y absolutamente convencido" de que va a ganar las elecciones el 9 de marzo.

El presidente de los populares ha insistido en que su proyecto es de "esperanza, de futuro y de concordia" y que gobernará para todos los españoles. "Es la España que habla con Merkel y Sarkozy y no con Fidel Castro", ha añadido, antes de criticar que Zapatero se ha dedicado a "revisar la historia".