OBJETIVO. Reducir las emisiones es el gran reto actual de la industria del automóvil. / E. C.
Economia

Los fabricantes insisten en retrasar la aplicación de los límites de CO2

Desde la Asociación de Constructores Europeos de Automóviles y otras patronales españolas se apuesta por aplazar la medida prevista para 2012 hasta 2015

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No hay duda de que la industria del automóvil está llamada a dedicar importantes esfuerzos en I+D y a destinar cuantiosas inversiones en el desarrollo de tecnologías que contribuyan de manera tajante a reducir el número de emisiones de CO2 de los vehículos. Es el gran reto. Máxime cuando desde la Comisión Europea han «apretado las tuertas» y decidido que en 2012 entrarán en vigor los límites marcados para las emisiones de CO2. Desde que se anunciara esta medida, los fabricantes de automóviles han manifestado su malestar por los plazos concedidos por considerarlos muy cortos.

La Asociación de Constructores Europeos de Automóviles (Acea) ha pedido esta misma semana a la Comisión Europea una moratoria, de manera que se aplace la medida de 2012 a 2015. A pesar de que cerca del 60% de los automóviles que lleguen al mercado europeo en 2012 estarán en este sentido en una avanzada fase de desarrollo, el presidente de la Acea, y también presidente de PSA Peugeot-Citroën, considera que «la propuesta de Bruselas sobre penalizaciones para los vehículos por superar los límites de emisiones de CO2 es desorbitada y desproporcionada.

«Nuestra industria está comprometida con la reducción de emisiones -puntualizó-. Apelamos a una legislación que podamos cumplir y que salvaguarde la diversidad de nuestra industria asegurando, al mismo tiempo, la accesibilidad de los vehículos para los ciudadanos», añadió.

Visión española

Desde la Asociación Española de Fabricantes de Vehículos (Anfac) aseguraban que en línea con Acea ya han comunicado al Gobierno español que la industria necesita unos plazos realistas y la adopción progresiva de la legislación, «es decir, retrasar la fecha a 2015 y la introducción de un sistema de adopción progresiva que iría haciendo aplicable esta reglamentación a un número creciente de vehículos nuevos entre 2012 y 2015».

En Anfac insisten en que la mayoría de los coches que saldrán al mercado en 2012 ya están en producción. Además, la fijación de objetivos globales no es suficiente información para la planificación de la producción con vistas a cumplir cualquier legislación de emisiones.

«No es previsible que se establezcan con claridad los requerimientos legales antes de 2009, sino más tarde y, además, el Parlamento Europeo ha reconocido la necesidad de plazos más largos para la industria, respaldando la fecha de 2015 para la entrada en vigor de esta regulación», apuntan en Anfac.

El presidente de la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos de Motor, Reparación y Recambios (GANVAM), Juan Antonio Sánchez, también se manifiesta en total acuerdo con el apoyo a esta moratoria porque considera que es muy difícil ajustarse a plazos cortos. «Si es así, se tendrán que buscar soluciones tecnológicas que serán más costosas y que de alguna manera se trasladarán finalmente al precio final del vehículo, lo que perjudica al consumidor y, en definitiva, a la industria automovilística».