Un nuevo asalto a punta de pistola siembra el pánico en el comercio de Puerto Real

El hombre encañonó a la empleada con una pistola y le ordenó que le entregara el dinero de la caja registradora. En apenas un minuto el asaltante se dio a la fuga con un escaso botín que apenas alcanza los 100 euros. El varón es alto, como en anteriores ocasiones, y huyó a pie hasta que se perdió de la vista de los testigos.

Sagasta es una de las perpendiculares de la calle de La Plaza, una de las más concurridas del municipio. Junto al supermercado hay un bar, una tienda de muebles y una peluquería. El hecho de perpetrar el golpe en el centro de la localidad es lo que diferencia este atraco de los otros tres sufridos a lo largo de este mes. Tanto las dos farmacias como la tienda de energía solar asaltadas desde que empezó febrero se encuentran situadas en barrios tranquilos de la periferia.

La nueva víctima no ha podido reconocer al atracador al tener la cara cubierta por un casco. Varios testigos aseguran que el asaltante conocía el comercio, dato en el que coinciden con las otras víctimas de semanas anteriores.

El atracador es un varón, alto, de mediana edad y nacionalidad española. La encargada del establecimiento no ha querido filtrar más información para no entorpecer la investigación policial.

Al cerrar el supermercado, la víctima se acercó a la Jefatura de Policía Local para denunciar lo sucedido. Con todo, la Policía Nacional, que ya tiene huellas tomadas en los últimos robos, es la encargada de la investigación. Han pasado 25 días desde el primer atraco y aún no se han producido detenciones.

A todo esto, los empresarios se sienten desprotegidos y muchos prefieren tomar sus propias precauciones. El miedo a que les pueda tocar en el próximo atraco ha hecho mella y han comenzado a estudiar medidas de seguridad. Las farmacéuticas atracadas iban a blindar sus boticas y las tiendas vecinas a la de energía solar ya han instalado porteros automáticos para controlar el acceso a los establecimientos.

Desde la Asociación de Comerciantes, Apreco, piden calma y un refuerzo en las medidas de seguridad de todos los negocios que utilicen efectivo. La asociación tiene el compromiso por parte de la Policía Local de ejercer vigilancia para evitar los robos.

A pesar de que los agentes patrullan a pie desde hace semanas por el centro de la localidad no se ha conseguido disuadir al atracador que, por el momento, sigue en libertad.

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