Jornada de reencuentros en el Camp Nou

El Camp Nou vivirá hoy, durante la disputa del partido de ida de las semifinales de la Copa del Rey, una noche de reencuentros muy especiales. El Barça recibe a un Valencia dirigido por el héroe de Wembley, que le intentará arrebatar el pase a la gran final sustentándose en el acierto de un David Villa que siempre tiene la puntería muy afinada ante Víctor Valdés.

El duelo llega en momentos dispares. El Barça lo afronta con optimismo. Con una sonrisa que sus jugadores esbozan tras saberse vivos en la Liga y con pie y medio en los cuartos de final de la Liga de Campeones. El Valencia lo vivirá con tensión tras una sinuosa temporada con juicios incluidos. Así que para Ronald Koeman, siempre bien recibido en un Camp Nou que recuerda su mítico zambombazo que le valió al club azulgrana su primera Copa de Europa, la opción de la Copa se le presenta como la gran tabla de salvación de la temporada.

El técnico holandés cuenta con un aliado en sus filas de mucho peso. Villa ya sabe lo que es eliminar al Barça de la Copa del Rey. Lo hizo con el Zaragoza a principios de 2004. Desde entonces, el ariete asturiano le ha marcado seis goles en nueve partidos de Liga y Copa al Barça, dos con el Zaragoza y cuatro con el Valencia. A pesar de los registros de su goleador, Koeman considera que el Barça es el favorito de la eliminatoria quizá recordando el 0-3 que los azulgrana le endosaron a su rival en el partido de Liga disputado en Mestalla. No obstante, el holandés considera que aquel equipo ha evolucionado mucho para intentar lograr «un resultado que nos permita tener opciones de resolver en Mestalla» el próximo 20 de marzo.

El Valencia acumula una baja de peso para su centro del campo. Marchena quedó fuera de la convocatoria por culpa de unas molestias físicas. La baja del medio centro trastocará los planes de Koeman, que daría entrada a Sunny para conformar la pareja de pivotes defensivos junto a Maduro.

Enfrente se toparán con un Barcelona que ha recuperado sus mejores sensaciones. Tal es el cúmulo de jugadores que aglutinan la plantilla azulgrana que Rijkaard ya se permite hasta dar descanso a alguno de los titulares. En esta ocasión será Ronaldinho que descansará, después de su buen partido ante el Levante.

La única línea intocable sería la defensa. Con Valdés de guardameta titular, nadie se plantea el debut de Pinto, la retaguardia la encabezarían Márquez y Milito como centrales y Puyol y Abidal en los laterales.