A LOS JUZGADOS. Juan Manuel J. S. a la salida de los calabozos cuando entra en el coche de la Guardia Civil. / ÓSCAR CHAMORRO
Ciudadanos

La jueza envía a prisión sin posibilidad de fianza al homicida confeso de Loli Amaya

El joven prestó declaración ayer en el juzgado y fue conducido luego a Puerto II La población chiclanera respira aliviada tras haberse esclarecido el crimen

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El joven de 24 años que confesó haber apuñalado a Loli Amaya fue puesto ayer a disposición de la jueza que instruye la causa, la titular del juzgado mixto número 3 de Chiclana, hasta donde fue conducido por la Guardia Civil, que tomó importantes medidas de seguridad para evitar un posible linchamiento. Finalmente, la autoridad judicial decretó prisión incondicional, sin posibilidad de fianza, para Juan Manuel J. S. como supuesto autor de un delito de homicidio consumado y un segundo de robo con violencia. Fue llevado a Puerto II.

Pasaban unos minutos de las tres de la tarde de ayer cuando, en el interior de un vehículo de la Guardia Civil, fuertemente escoltado, el presunto homicida salía en dirección al que será su nuevo hogar, de forma preventiva, hasta que se celebre el juicio por este brutal crimen.

Durante toda la mañana, Chiclana fue escenario de dos traslados muy esperados por todos los ciudadanos que han seguido de cerca el caso. Tras su detención y posterior confesión del apuñalamiento, este joven de 24 años y chiclanero de nacimiento salía de los calabozos de la Casa Cuartel de la ciudad de Chiclana para prestar declaración ante la titular del juzgado número 3 de la localidad. Eran apenas las nueve y media de la mañana cuando abandonaba las dependencias policiales.

La declaración de Juan Manuel J. S. duró unas tres horas y media, aproximadamente. Una vez más, el joven acusado volvió a explicar que la intención que tuvo al entrar en la colchonería donde trabajaba la víctima era conseguir dinero, pero no acabar con la vida de Loli Amaya. De ahí que haya sido acusado de un delito de homicidio y no de asesinato.

Mientras era interrogado en el juzgado, en la calle le esperaban decenas de vecinos y familiares de la fallecida, que gritaban insultos, amenazas contra Juan Manuel J. S. La Guardia Civil estuvo atenta por si la situación se desbordaba, pero los agentes lograron sacar al acusado a gran velocidad.

Había pasado sólo un día desde que los buzos del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil localizaran el cuchillo con el que presuntamente apuñaló a Loli Amaya en el cauce urbano del río Iro.

Este ingreso en prisión del presunto autor del brutal crimen que ha causado una gran conmoción en la opinión pública de toda la provincia, ha calmado bastante los ánimos y mitigado el temor de muchos chiclaneros, sobre todo de los familiares de la víctima y de los comerciantes de las zonas asaltadas días atrás.

Además del arma, los agentes hallaron en la casa del imputado varias prendas de ropa manchadas de sangre que supuestamente habría utilizado cuando entró en la colchonería.

Muy violento

La jueza también interrogó a Juan Manuel J. S. por el atraco ocurrido en un establecimiento de ropa de la calle Jesús Nazareno, y que cometió tres horas antes de darle muerte a la dependienta. El detenido reconoció ante la Guardia Civil no sólo haber agredido mortalmente a la fallecida, sino también su participación en el primer atraco.

Loli Amaya murió en la noche del pasado 14 de febrero, Día de San Vanlentín, cuando el joven entró en la tienda de colchones Dulces Sueños de la Cuesta del Matadero de Chiclana a robar la recaudación del día. Tras unos segundos en el interior del establecimiento asestó una puñalada mortal y le hirió hasta en dos ocasiones más con un cuchillo de cocina de 25 centímetros de hoja. Este crimen generó una honda preocupación entre los vecinos de Chiclana, que clamaron por una rápida respuesta policial.

chiclana@lavozdigital.es