![](/cadiz/prensa/noticias/200802/21/fotos/004D4JE-JER-P3_1.jpg)
Un informe sobre el mal estado de los juzgados llega a Inspección de Trabajo
El número 4 suspendió ayer las vistas por las deficiencias de las instalaciones Los jueces exigen por escrito un edificio «sin problemas de ningún tipo»
Actualizado: GuardarLa inundación que anegó los pasillos de los juzgados número 2 y 4 de Jerez el pasado martes ha colmado la paciencia del cuerpo de profesionales, que, tras un encuentro mantenido por la Junta General de Jueces el mismo día de los hechos, ha elaborado un informe en el que se ponen de relieve las numerosas deficiencias del edificio de Tomás García-Figueras. Así lo confirmó ayer el juez decano, Juan José Parra, explicando que el documento en cuestión será remitido al Consejo General del Poder Judicial, para que tenga conocimiento del estado en el que se encuentra el inmueble.
«Vamos a remitir también una copia a la Inspección de Trabajo, para que los técnicos especialistas procedan a la evaluación de la situación del edificio, y remitiremos otra copia para que en la Junta cualquier acto de la Administración que se produzca se comunique al decano y así adoptar las medidas necesarias». Aunque los puntos concretos del informe no han trascendido, Parra sí recalcó el objetivo del mismo, orientado a reivindicar «una sede judicial digna, sin problemas de ningún tipo y que no estemos continuamente parcheando las instalaciones».
El decano también recordó el servicio público que se presta dentro de las paredes del edificio, que requiere que se ofrezcan soluciones a los problemas de los ciudadanos sin ningún tipo de impedimento. Un razonamiento muy oportuno si se tiene en cuenta que la actividad de uno de los juzgados, concretamente el del número 4, se encontraba paralizada en el día de ayer y con todos los juicios suspendidos. Un hecho al que, sin embargo, el juez restó importancia, asegurando que «los funcionarios están trabajando aunque no se ha podido utilizar la sala, pero se utilizará en breve».
El incidente que desataba nuevamente la polémica se producía el pasado martes, cuando los pasillos del edificio se llenaron de agua como consecuencia de una avería localizada en los cuartos de baño, que se vio agravada por la intensa lluvia registrada durante la madrugada. Curiosamente, se da la circunstancia de que dicha avería se produjo por primera vez diez días atrás, y durante todo ese tiempo una empresa subcontratada por la Junta de Andalucía supuestamente arregló hasta en cuatro ocasiones los desperfectos del inmueble, aunque obviamente sin los resultados esperados.