Victoria para el asesino del DVD

El pasado sábado, la cadena de radio japonesa NHK anunciaba que Toshiba abandona la producción de reproductores de HD-DVD, poniendo punto y final a la guerra de formatos que esta compañía mantenía con Sony y su Blu-Ray por la sucesión del DVD tradicional.

La noticia ha corrido como reguero de pólvora entre agencias de noticias y medios de comunicación; sin embargo, el abandono aún no ha sido confirmado por la propia compañía. En un reciente comunicado, responsables de Toshiba aseguran que «se encuentran estudiando su estrategia de mercado y no han tomado todavía ninguna decisión al respecto».

Pese a no haber sido anunciada oficialmente, la retirada de Toshiba ya se da por segura entre muchos analistas. La compañía japonesa ha sufrido, en lo que va de año, serios reveses que la ponen en una muy difícil posición frente a Sony.

Revés de las productoras

En la feria tecnológica CES de enero, los directivos de Toshiba tuvieron que desayunarse con el anuncio de Warner Bros Entertaiment de que retiraba su apoyo exclusivo al formato HD-DVD para pasar a producir también en Blu-Ray. Apenas una semana más tarde, la Paramount, que era uno de los principales valedores de HD-DVD, seguía los pasos de la Warner y se pasaba a la competencia. Tras esta fuga, HD-DVD se quedó tan sólo sólo con los apoyos de la Universal, Intel y Microsoft.

Las Majors de Hollywood no han sido las únicas en retirar su apoyo al formato de Toshiba. Grandes cadenas de electrónica y ocio como Wal-Mart o Best-Buy; y videoclubes online, como Netflix, también han dado la espalda al HD-DVD. Curiosamente, Wal-Mart y Netflix están fuertemente participadas por Consejeros delegados de la propia Microsoft.

El abandono, de confirmarse oficialmente, dejaría tras de sí pérdidas de miles de millones de yenes para Toshiba pero no supondrá su fin, ni mucho menos. De hecho, la decisión, lejos de perjudicar a la compañía, la ha beneficiado. Las acciones de Toshiba subieron un 5,74% en la bolsa de Tokio al conocerse la noticia. El valor de Sony subió un uno y medio por ciento. Parece que el fin de la guerra de formatos ha sido recibido con alivio por parte de los inversores. Se calcula que Toshiba podrá mejorar sus márgenes de explotación entre 260 y 320 millones de euros después de librarse del lastre del HD-DVD.

La retirada de la compañía afectaría exclusivamente al mercado del cine y los reproductores domésticos en este formato. No se descarta que Toshiba siga manteniendo el HD-DVD como sistema de grabación de alta capacidad para el mercado informático. El canto del cisne de HD-DVD es una victoria especialmente dulce para Sony. En los años 80, la compañía nipona era la principal impulsora del vídeo en formato Beta, que resultó herido de muerte por el VHS desarrollado por JVC.

Ahora Sony tiene el camino despejado para imponer su formato como estándar único de alta definición. En Estados Unidos, Blu-Ray ya controla el 70% de las producciones para el mercado del vídeo doméstico. En Japón, la venta de reproductores Blu-Ray ya ostenta una cuota de mercado superior al 90%. Curiosamente, el éxito de Blu-Ray no se debe a la industria del cine sino a la de los videojuegos. Aparte de contar con muchos más apoyos entre las compañías de electrónica como Philips, Hitachi, Pioneer o Samsung, Sony decidió instalar reproductores de Blu-Ray en su consola Playstation 3.

El tiron de ventas de la PS3 fue determinante para el triunfo de Blu-Ray. Después de un debut más bién flojo, las ventas de esta consola de nueva generación han superado, por primera vez, a las de Xbox 360 en Estados Unidos. Incluso se rumorea que Microsoft planea instalar lectores de Blu-Ray en su Xbox 360.

Pasado y futuro

La guerra entre Blu-Ray y HD-DVD se inició en 2003, cuando Sony decidió desarrollar su propio formato fuera del DVD Fórum. A comienzos de los 90, este organismo internacional fue el encargado de poner de acuerdo a los fabricantes de tecnología para crear un formato único que sucediera al VHS. Así fue como nació el DVD que hoy conocemos. En 2003, el DVD Forum había aprobado el estándar HD-DVD como sucesor oficial del DVD tradicional.

La decisión de Sony de ir por libre inició una guerra en la que, multinacionales de electrónica, estudios de cine y cadenas de distribución se posicionaron en favor de uno u otro. Los consumidores han sido los grandes perjudicados en esta disputa que, por fín, llega a su último capítulo.

Pese al abandono de Toshiba, no todo va a ser un camino de rosas para Blu-Ray. El formato de Sony se enfrenta, por primera vez en la historia, a una creciente competencia que viene desde internet. Así como la industria discográfica ha tenido que bregar con la venta legal de música online, Blu-Ray va a tener que convivir con la venta y alquiler en la red de cine en alta definición. Este enero, Apple anunció su intención de alquilar películas online en alta definición a través de su sistema AppleTV y la web iTunes. Además, el software para hacer copias de seguridad de películas en alta definición ya está listo para que los usuarios de e-mule hagan de las suyas.